Si los deslizamientos y grietas de hasta 4 metros en Santa Clara de San Vito de Coto Brus le parecieron inusuales, ¿cómo reaccionaría usted si le dicen que en Panamá está ocurriendo una situación similar?
Eso está pasando en una región fronteriza llamada Renacimiento, Breñón, en la provincia de Chiriquí, a unos 41 km de la montaña cotobruseña.
Mientras que en suelo tico 17 hectáreas están viniéndose abajo y 13 familias evacuaron por una directriz de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), al otro lado de la frontera la situación no ha alcanzado tal gravedad, pero hay sorpresa pues ya hay calles partidas y grietas de hasta dos metros.
Los expertos panameños consideran que la causa principal para que esto pase es la lluvia, mismo diagnóstico que se ha dado en Costa Rica sobre lo que ocurre en San Vito. No obstante, los canaleros también sospechan de la influencia que tiene la sismicidad en la ruptura de la superficie.
“La actividad sísmica influye en el suelo y la roca, además de las lluvias intensas”, mencionó Edgar Chichaco, geólogo del Instituto de Geociencias de la Universidad de Panamá, a la Televisora Nacional de Panamá (TVN).
Asimismo, Chichaco indica que están muy pendientes de lo que sucede en Coto Brus, pues es un fenómeno muy similar.
“Se ha planteado actividad desde el 17 de agosto del sismo de 6,2 grados (Golfito). El viernes pasado se dio otro en la misma región y se han dado sismos en el área de San Vito de magnitudes de 4,5 grados, en Río Sereno (Panamá) de 4,8; o sea se han venido dando en la Península de Burica y favorecen los desplazamientos y la aparición de grietas”, explicó el sismólogo panameño.
“NO HAY RELACIÓN”
Julio Madrigal, geólogo de la CNE y uno de los encargados de visitar el sitio durante estas dos semanas, afirma que la sismicidad que ha aquejado la Zona Sur del país, registrándose hasta 700 eventos telúricos en los últimos meses, no está influyendo gravemente en las grietas de Santa Clara.
“Es un problema de saturación de los suelos, con incidencia de la sismicidad en el área, pero el detonante directo es la saturación de los suelos y las características del terreno”, externó Madrigal.
También fue claro al decir que el levantamiento de la tierra los vecinos lo reportaron desde el mes de octubre y afirman que el fuerte temblor del mes de agosto no les afectó. Aunado a esto, descarta que las grietas de ambos lugares tengan algún tipo de conexión.
“No hay relación de los deslizamientos de ninguno de los dos lados con el otro, geológicamente no, cualquier deslizamiento que se dé por cualquier parte tienen características distintas”, añadió Madrigal.
PLACAS Y FALLAS
Por su parte, Eliécer Duarte, geólogo del Observatorio Costarricense Vulcanológico y Sismológico (Ovsicori), analiza lo que pasa en ambos sitios y afirma que el movimiento de placas y fallas locales pueden tener influencia.
“La zona donde está Santa Clara tiene un arreglo de fallas, una falla tiene tiene el propio nombre de la comunidad, es una zona altamente sísmica porque está la microplaca de Panamá actuando continuamente, la posición de la placa de Cocos entra muy horizontal, eso produce actividad sísmica muy superficial”, señaló Duarte.
Mientras que en Panamá tienen la microplaca de Panamá que puede estar ejerciendo movimientos.
“Eso puede denotar en cualquier otro punto, incluido el otro lado de la frontera, el problema hay que verlo como una cuestión regional, no es geográfica ni administrativa que está bajo influencia de esa microplaca que está actuando sobre la región”, comentó Duarte.
PERIODISTA: Alejandro Monge
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Sábado 17 Noviembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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