En esta ocasión, y siguiendo la línea del cáncer de piel en los 3 artículos publicados previamente, conversaremos sobre las lesiones premalignas de la piel (queratosis actínicas, cuerno cutáneo, enfermedad de Bowen), las cuales son las precursoras del cáncer de piel y que nos alertan de que en nuestra piel ya hay daño solar importante y debemos tener mucho cuidado.
Una lesión premaligna es aquella que tiene gran potencialidad de transformarse en maligna por radiación ultravioleta (UV); son resultado de proliferaciones de queratinocitos (células que se encuentran en la epidermis, capa más externa de la piel) con alteraciones en respuesta a la exposición prolongada a la radiación UV.
QUERATOSIS ACTÍNICAS
Las queratosis actínicas se han considerado históricamente como lesiones premalignas con el potencial de convertirse en carcinomas epidermoides; sin embargo, modernamente se quieren considerar por algunos autores como una neoplasia como tal, sin embargo, no todas las queratosis actínicas finalizan en cáncer epidermoide.
CUERNO CUTÁNEO
Es una lesión dermatológica que aparece en áreas fotoexpuestas, caracterizada por una neoformación saliente blanco amarillenta, curva o recta, que simula un cuerno similar al de un animal. En la base de la lesión puede haber una verruga vulgar, una queratosis actínica o, lo más frecuente, un cáncer epidermoide.
ENFERMEDAD DE BOWEN
Son lesiones eritematosas (rojas), circulares u ovaladas con bordes bien delimitados, cubiertas por escamas y costras que al desprenderse dejan superficie húmeda y granular. Puede ocurrir en membranas mucosas como labios o intraoral. Cuando ocurre en el glande del pene se le llama eritroplasia de Queyrat, la cual es una placa delimitada con nitidez, rojiza y brillante
Menos del 5% evoluciona a un carcinoma epidermoide, su crecimiento es lento y pasan años antes de convertirse en un carcinoma epidermoide invasor.
DIAGNÓSTICO DE LA ENFERMEDAD
* Examen clínico
* Dermatoscopia (lupa especial)
* Biopsia con examen histológico (al microscopio)
TRATAMIENTO
* Criocirugía (Con nitrógeno líquido)
* 5-Fluoruracilo
* Electrocirugía más curetaje (raspado de la lesión)
* Láser de C02
* Radioterapia
* Cirugía convencional (con al menos ½ cm de margen)
* Cirugía Micrográfica de MOHS (en conjunto con patólogo) para lesiones extensas.
Para concluir con esta sección de 4 artículos que han salido de manera consecutiva semanalmente sobre el gran capítulo que es el cáncer de piel, quiero reforzar el concepto de la fotoprotección con bloqueadores solares dermatológicos, con factor de protección por arriba de 15 y de amplio espectro (que es contra luz ultravioleta A y B), además de la utilización de medidas protectoras.
Cuando se observe una lesión sospechosa no se debe esperar, se debe recurrir a un especialista en el tema para realizar un diagnóstico certero; en ocasiones ha sucedido que han quitado lesiones malignas sin haber hecho el diagnóstico o sin haber sido estudiadas y cuando estas reaparecen al tiempo ya han hecho metástasis a otros tejidos u órganos y el pronóstico es desfavorable.