Consulta
Tengo dos hijos pequeños que ya van a entrar a la escuela y me gustaría saber qué tipo de autoridad es la más sana que debería aplicarles. Tuve un padre muy rudo y no quiero llegar a eso con los míos, y mi esposa tuvo un padre muy alcahuete y muy suave, y tampoco me parece. Me gustaría aplicar una autoridad más adecuada, pero no sé cuál desarrollar.
Respuesta
Me encanta su pregunta porque ¿qué sería de los hijos sin el elemento de la autoridad paternal? Sería un desastre, los hijos harían lo que quisieran, por lo tanto su presente y futuro estaría lleno de conflictos, de crisis y dolor.
La autoridad se inicia al tener hijos. Esta es natural, necesaria y una herramienta útil para criarlos con excelencia, aclarando que la autoridad no es una potestad de dominación para esclavizar a los hijos, llevándolos una obediencia ciega, más bien la autoridad (que deriva del verbo latino "augere") significa ayudar a crecer.
Tipos de paternidad
4Autoritario: Mucho control, poca calidez. Padres rígidos, que solo ordenan, como si fueran coroneles del ejército.
4Permisivo: Poco control y mucha calidez. Es un enorme trasatlántico, “un barco” que pierde el control, padres que lo permiten todo, sobreprotector, asfixia con su cariño.
4Indiferente: Poco control, poca calidez. No saben nada de sus hijos, existe descuido, están a la deriva; no hay caricias, ni límites. Los hijos son más propensos a caer en adicciones o conductas antisociales.
4Democrático (adecuado): Mucho control, mucha calidez. Hay un equilibrio entre el dar y tomar control y caricias, manejan límites claros y firmes, dejan a su hijo ser y crecer, pero observando, reconociendo y encaminándolos por la vida.
Características sanas
de la autoridad
• Lenguaje apto para cada situación.
• Límites muy claros, de los que no se puedan sobrepasar: no puede ser ni dictatorial, ni injustificada, ni permisiva, ni aleatoria.
• Habilidad para no producir temor, pánico, terror, miedo, intimidación, etc.
• Buen contenido y unas formas de llevarlo a cabo, llenas de seguridad y firmeza, que sean fáciles de comprender y posibles de realizar.
• Claridad para dar certeza en su presentación, cumplimiento y consecuencias.
• Nitidez para que no sea o parezca confusa y fácil de esquivar.
• Justicia, equidad y coherencia entre lo que se exige y lo que se puede cumplir.
• Tranquilidad de que sus hijos van a crecer en libertad y no se van a frustrar, traumar o perder su autoestima porque no les dan lo que esté de moda.
• Los padres no son amigos de sus hijos, son sus padres y por eso pueden y deben ejercer plenamente su autoridad.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
CRÉDITOS: Mauricio Mora
EMAIL: [email protected]
Lunes 15 Octubre, 2018
HORA: 12:00 AM
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