L
a imagen del presidente Carlos Alvarado, como ser humano, más allá de su labor como mandatario, cae en picada entre los costarricenses. Al menos así lo refleja el último estudio de la empresa CID Gallup.
Si bien, para setiembre entre las personalidades de gobierno evaluadas, Alvarado es quien más opiniones favorables alcanza con 46, tiene también más opiniones desfavorables con 48.
Además desde mayo, cuando fue investido presidente, a la fecha ha perdido 27 puntos sobre la opinión de su imagen, según el estudio.
Otras figuras como la canciller Epsy Campbell o el ministro de la Presidencia, Rodolfo Piza, logran tener un saldo positivo en cuanto a la percepción de su imagen por la gente, aunque con diferencias mínimas.
La ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, también aparece con saldo negativo. El único que destaca con un puntaje positivo de 12 es Rodolfo Méndez Mata, ministro de Transportes.
SIN CARISMA
Para el analista Sergio Araya hay que considerar que algunos de los personajes evaluados, como la ministra de Hacienda y el titular de Transportes, tal vez no son tan conocidos como el presidente Alvarado.
“Tengo la percepción sobre la valoración de estos cinco nombres, que la gente no logra distanciar a la hora de calificar, a la persona del cargo que ejerce, y entonces más que una opinión hacía él como persona, si es simpático o no, o buena gente, si es mentiroso o no, o congruente entre lo que piensa y lo que dice, hay una valoración sobre el cargo que ejerce que es lo que le da notoriedad pública”, explicó Araya.
El experto también dice que el presidente Alvarado muestra menos empatía con la gente, como sí lo logró el exmandatario Solís.
“La elección misma de don Carlos no se debe tanto a sus atributos personales, porque hay que recordar que en la primera vuelta él quedó en segundo lugar, y si se contrasta con lo que alcanzó Luis Guillermo Solís en primera ronda, Alvarado tuvo un apoyo mucho menor. Eso indica que su liderazgo o carisma fue menor comparado con su antecesor”, agregó el politólogo.
La encuesta refleja que la figura de Alvarado no tiene ese capital propio, ese carisma que sí tuvo Solís, que a pesar de las críticas a su gobierno él como expresidente sigue siendo querido por la gente.
Lo que hace que Alvarado no pueda distanciarse de su trabajo como mandatario al ser calificado.
“Él no tiene ese arrastre personal que le permita la diferenciación del cargo, como sí le pasaba a Luis Guillermo Solís, algo parecido que también ocurrió con Abel Pacheco”, enfatizó Araya.
La encuesta tomó como consulta a 1.214 personas mayores de 18 años, en entrevistas aleatorias representativas en todo el país. Las mismas se realizaron entre el 3 y el 13 de setiembre del 2018. Tiene un margen de error: ±2.81 puntos y nivel de confianza del 95%.
PERIODISTA: Bharley Quirós Navarro
EMAIL: [email protected]
Martes 25 Septiembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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