Desde que se anunció la creación del Pabellón Deportivo y el Centro Acuático para San José, en la administración anterior, no se avanzó mucho. Ambas ideas se lanzaron de manera paralela en julio del 2016, pero al día de hoy solo existen los planos del Pabellón, el cual se declaró inviable, mientras se decidió que las piscinas tampoco se harán.
Aunque las obras se frenan dos años después, la realidad del caso es que se gastó más de un millón de dólares (cerca de 600 millones de colones). El Centro de Investigación y Capacitación en Administración Pública (Cicap) de la Universidad de Costa Rica, confirmó a DIARIO EXTRA que eso cobraron por los planos antes citados.
Sin embargo, no se utilizarán, pues el Consejo Nacional del Deporte determinó que esta infraestructura es un lujo con muchos riesgos para su mantenimiento. Además, creen que no se ajustan a las necesidades de los deportistas costarricenses.
El Instituto Costarricense del Deporte (Icoder) era el encargado de velar por las obras, para eso nombró una Unidad Ejecutora del Proyecto, misma que defendió contra viento y marea la creación de los megaproyectos, por eso los llevó al límite, incurriendo en gastos innecesarios, pero parece que no tendrán ninguna consecuencia por el despilfarro económico.
“Si se detecta alguna negligencia sobre algún punto se podría sentar responsabilidades, de otra manera no. Muchos de estos proyectos, sea este o cualquier otro, se inician y en el camino se evalúan. Lo peor que usted puede hacer es identificar problemas para desarrollar los proyectos, que haya inviabilidad, y que aun así se continúe”, determinó Hernán Solano, ministro del Deporte.
Se ha intentado conversar con Alba Quesada, directora del Icoder, quien es una de las principales responsables en este tema, pero en la oficina de prensa aseguran que no puede hacerlo hasta que se tomen acuerdos en firme.
PERIODISTA: Andrés Zárate Sánchez
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Martes 18 Septiembre, 2018
HORA: 12:00 AM