A las 11:45 a.m. del miércoles, el presidente electo Carlos Alvarado y su esposa Claudia Dobles llegaron la Presidencia de la República en Zapote a reunirse con el mandatario Luis Guillermo Solís y su compañera Mercedes Peña, el objetivo del encuentro fue hablar sobre la transición de mando del poder, pero de eso no se supo nada.
Luego de casi tres horas de “una agenda intensa de trabajo” -según Solís-, de esa reunión no trascendió ni un detalle. Los presidentes bajaron a dar una breve declaración y no aceptaron ni una sola pregunta de la prensa.
En siete minutos Solís y Alvarado dieron sus declaraciones, pero ninguno mencionó un solo punto de esa intensa agenda de la que habló Solís. El discurso de ambos cayó más en lo emotivo que en lo informativo.
Solís tan solo reveló que instruyó a su gabinete para que atienda cualquier petición o consulta del equipo de trabajo de Alvarado previo a la toma de posesión del 8 de mayo.
Por su parte, Alvarado dijo que hablaron del estatus de proyectos en los que “se ha avanzado” y que según dijo, se ejecutarán en esta transición, así como temas importantes “para darles seguimiento”, pero igual, ninguno de esos proyectos se conoció.
Añadió que agradeció consejos que le dio Solís por su experiencia.
PERIODISTA: Carlos Mora
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Jueves 19 Abril, 2018
HORA: 12:00 AM
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