Los cocteles, vinos, bocadillos, toda la comida y demás gastos que derrocha el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto en sus actividades protocolarias les han salido caro a los costarricenses.
En casi cuatro años la Cancillería ha gastado ¢474 millones en sus recepciones diplomáticas. Así se desprende de un informe elaborado por el departamento financiero de esa institución a solicitud de DIARIO EXTRA.
Las actividades van desde reuniones que tiene el canciller Manuel González y cada uno de los directores de los despachos del ministerio, despedidas de embajadores, reuniones del cuerpo diplomático, cumbres y congresos.
El informe detalla que el primer año de esta administración fue cuando más gastos hubo en la realización de ese tipo de actividades. De mayo a diciembre del 2014 la Cancillería gastó ¢160 millones.
Si bien la celebración del traspaso de poderes ese año significó un gran desembolso, hubo otros gastos millonarios que mejor juzgue usted.
La Dirección de Política Exterior gastó en setiembre de 2014 aproximadamente ¢22 millones por tres días en la Reunión de Municiones de Racimo, el 11 de noviembre esa misma instancia desembolsó ¢3,3 millones en vinos “para mantenerlos en el inventario de la bodega” y para cerrar el 12 de diciembre ¢5 millones en “recuerdos país para ser entregados a las delegaciones en las diferentes visitas de Estado”.
En 2015 siguió la gastadera a manos llenas. Ese año en total se fueron ¢126 millones. Dentro de lo más costoso está la alimentación de los invitados a la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se realizó en el país entre el 24 y 30 de enero; en total desembolsaron ¢70,3 millones solo en alimentación.
Pero además de ese gasto, ese año -por ejemplo- la Cancillería gastó ¢1,6 millones en la despedida de la exembajadora de Gran Bretaña, Sharon Campbell, el 6 de enero y un monto similar para festejar el aniversario de la Cancillería.
En 2016 y 2017 los gastos reportados por la Cancillería fueron menores (¢67 millones y ¢122 millones, respectivamente), pues no se detallaron los de la Dirección de Servicio Exterior.
Estas cifras resultaron un insulto para varios sectores de la oposición. El diputado Mario Redondo dijo que los gastos en este tipo de eventos deben de revisarse y acusó al Ministerio de Relaciones Exteriores de no apoyar una mayor contención de la plata.
“Esto es mucho dinero. Se pueden atender estas delegaciones y demás compromisos con un presupuesto más modesto. El canciller González no solo quedó debiendo desde el punto de vista político en el ejercicio de sus funciones, sino también en el plano administrativo y presupuestario de la Cancillería”, criticó.
Por su parte la Cancillería se defendió. La jefa de despacho del ministro, Natalia Córdoba, insistió que la operación de esa institución se hace con un presupuesto austero que no ha crecido en los últimos tres años.
Mencionó que los gastos en ocasiones resultan difíciles de afrontar porque un 80% son en dólares.
Sobre los gastos propios en actividades protocolarias mencionó que son necesarios porque “en el mundo la diplomacia se hace de frente”.
PERIODISTA: Carlos Mora
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Lunes 22 Enero, 2018
HORA: 12:00 AM
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