Japón. (SEP).- Dónde más sino en este país asiático podría haber nacido semejante novedad, y es que la intención de prolongar los efectos de muchos productos ha llevado a las empresas del mundo a crear aspectos duraderos con relativo éxito.
Si bien es cierto en algunos casos no se logra por un tiempo muy amplio, en otros sí se ha conseguido un margen muy valioso.
Es el caso del maquillaje permanente, de los químicos para conservar el esmalte de uñas por más tiempo, los cosméticos para prolongar la juventud, etc.
La razón es simple: todos queremos que lo que nos gusta sea duradero, incluyendo claro, los helados.
Quienes los adoran saben que es un producto que debe ser consumido con rapidez, pues pierde su consistencia y ya no es lo mismo. Su consumo es uno de los placeres más singulares para la mayoría y por eso los japoneses desarrollaron un tipo de helado ¡que no se derrite!, aunque según parece todo se dio a partir de un descubrimiento hecho accidentalmente por un chef.
Hasta ahora, dependiendo de la calidad del producto, luego de salir del congelador este comienza a gotear y pierde su textura casi de inmediato, mientras inician derretidos su camino manchando ropas y embarrando a su consumidor por dedos y brazos.
Sin embargo, tras la divulgación de esta noticia pareciera que quienes aman este alimento ya podrán prolongar dicho placer, pues desde Oriente ha llegado el helado que no se derrite, al que no le afecta la temperatura del ambiente ni la exposición a la luz solar, porque a pesar de todo sigue manteniendo su forma y su sabor.
Pero eso no es todo, pues, además, lo más sorprendente aún es que se conserva frío por dentro.
¿CÓMO PASÓ?
Como muchas de las cosas con que se ha topado el ser humano, esta maravilla también se origina por casualidad, mientras un cocinero intentaba darles uso a las fresas que fueron cultivadas durante el terremoto y tsunami de 2011, las cuales serían desechadas por no haber tenido un crecimiento normal.
Tras experimentar con varias fórmulas, el chef japonés logró preparar una crema repostera que solidificaba las fresas y un grupo de estudiantes del Centro de Investigación de Desarrollo Bioterapéutico de la Universidad de Kanazawa se enteró del hallazgo. A partir de ahí decidieron dar seguimiento a los experimentos.
Uno de los principios del mencionado centro de estudio es estar abierto a la comunidad local, gracias a esta iniciativa y al enfoque en la innovación surgió el interés hacia este tema poco convencional.
El científico investigador, profesor de farmacia encargado de la investigación, Tomihisa Ota, asegura que el hallazgo gracias al cual se creó el helado que no se derrite es el polifenol, una sustancia líquida extraída de las fresas, que dificulta la separación del agua y de la grasa que componen el helado.
Por ello conserva su forma por una cantidad de tiempo mucho mayor a la habitual, incluso al estar expuesto al sol y como es una sustancia natural, sin aditivos químicos, el producto pudo salir a la venta sin necesidad de pasar por controles sanitarios, facilitando también su comercialización en el resto del mundo, aunque por el momento solo está a la venta en Japón.
KANAZAWA ICE
El producto ha sido bautizado con el nombre “Kanazawa Ice” y puede ser adquirido en una tienda con el mismo nombre, situada en el distrito de Higashi-Chaya, con un costo aproximado de 500 yenes (3 mil colones).
Esta ciudad cuenta con un estilo tradicional japonés sumamente atractivo para sus visitantes, pues allí aún existe la posibilidad de ver geishas caminando naturalmente por la calle y en la oferta gastronómica se encuentran platos y productos tradicionales japoneses, pero sin duda ahora, con la llegada del helado que no se derrite, recibirá cada vez más visitantes atraídos por esta curiosidad tan fascinante que ha sido noticia tanto en los medios de comunicación locales como en distintos portales de noticias digitales.
Entre las publicaciones se encuentran los relatos de las experiencias de clientes que ponen el helado al sol, otros que aguantan las ganas de probarlo esperando algunos minutos a ver si se derrite y otros, más extremos, que lo acercan a un secador de cabello encendido. Todos coinciden en que verdaderamente conserva su consistencia y al comerlo sigue frío.
En el resto del mundo, especialmente en las ciudades donde las temperaturas sobrepasan los 25º, comienzan a preguntarse cuánto tiempo tardará en llegar el helado que no se derrite, de qué forma será, etc.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Sábado 20 Enero, 2018
HORA: 12:00 AM
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