Un grupo de estudiantes y académicos de la Universidad Nacional (UNA) acusó ante el Ministerio Público tanto al rector Alberto Salom como también a su ex vicerrector de Extensión Hernán Alvarado por considerar que habrían incurrido en faltas a la Ley contra la Corrupción y el Enriquecimiento Ilícito.
El caso se relaciona con la denuncia presentada contra Alvarado por haberse ausentado del trabajo 1.730 días para realizar consultorías privadas.
La acción presentada ante la Fiscalía General, este 11 de enero a las 3:37 p.m., indica que la Rectoría de la UNA recibió una denuncia el 15 de marzo de 2016 en la cual se detallaron los posibles delitos en que habría incurrido Alvarado Ugarte y en la que se aportaron pruebas documentales y fotográficas, sin embargo, no se tomaron en cuenta para efectuar una investigación preliminar.
Hernando Alvarado fue acusado porque, entre 1990 y 2011, realizó diversas y cuantiosas consultorías remuneradas con entes privados y públicos, nacionales e internacionales, teniendo que viajar localmente y fuera del país, inclusive en el marco de las jornadas laborales asignadas en la Universidad Nacional, mientras disfrutaba de un régimen de dedicación exclusiva.
Según los denunciantes, las consultorías eran de índole estrictamente personal y privada, en las cuales no mediaba ningún acuerdo ni convenio con la Universidad, por lo cual tienen un carácter estrictamente lucrativo. Por esta razón, el funcionario fue removido de su cargo como Vicerrector de Extensión desde el 1° de enero 2017, sin embargo, logró jubilarse un mes después por lo que no fue posible imponerle una sanción disciplinaria, pues ya su vínculo laboral terminó con el centro universitario.
Para los denunciantes, Salom faltó al deber de probidad, al no realizar un estudio preliminar cuando se presentó la primera denuncia contra su subalterno e incumplió con los artículos del Reglamento de Régimen Disciplinario de la UNA.
Por otro lado, la Contraloría Universitaria, en una nota referida a la Procuraduría de la Ética, confirmó que asesoró al rector para que analizara, en coordinación con la Asesoría Jurídica, lo requerido en la denuncia sobre la posible existencia no solo de responsabilidad civil, sino también de eventual responsabilidad penal, y se procediera a interponer de manera oportuna, en caso que corresponda, las acciones pertinentes ante el Ministerio Público, si llegara a determinarse que existió incumplimiento al régimen de dedicación exclusiva en el caso del exfuncionario hoy pensionado.
El pasado 6 de diciembre, Alberto Salom confirmó a este medio que ya habían hecho la querella contra Alvarado y quedó de enviar la información, sin embargo, no fue así.
Se solicitó a la Oficina de Prensa de la UNA la reacción del jerarca sobre dicha acusación. Se nos indicó que estaba de vacaciones y regresaría el lunes.
