Las diferencias en oficiales de la Fuerza Pública y los mineros llegan a un punto alto, luego de que en dos audios se incita a agruparse y luchar contra la policía, a quienes pretenden quemarles las patrullas y golpearlos.
Alrededor de 1.500 nicaragüenses y 500 costarricenses permanecen internados en las montañas de Crucitas, en Cutris de San Carlos, donde están extrayendo oro y destruyendo las montañas que son patrulladas por los efectivos.
Los audios incitan a la violencia y ponen en alerta máxima a los uniformados que ingresan a la finca de 838 hectáreas, donde hace 9 meses se libra una lucha por la obtención del metal, que ha dejado muerte, deportaciones, decomisos de armas de fuego, droga y utensilios para extraer oro.
“Hace días vengo que me lleva el diablo, aquí nos vamos a dar cuenta quién tiene huevos y quién es coligallero de corazón. Vamos y nos ponemos en la laguna, le quemamos la patrulla y los cachimbiamos. No los matamos porque la conciencia no da para eso, dejémolos a culo pelado como mensaje al gobierno, de por sí el Presidente no ha hecho nada”, dice el audio.
En un segundo audio se escucha a un hombre que incita a defender su zona.
“Lo que siente hágalo, lo que piensa dígalo, voy a hablar con seis nicaragüenses que metieron unas armas AK-47 a Costa Rica porque le maltrataron una muchacha, la garrotearon. Los conozco y los busco para decirle y hacer el grupo, se ocupa coraje, cuando estemos en el punto y viene la patrulla se ocupan huevos, nos daremos cuenta quién echa para atrás”, asegura un hombre.
Las autoridades analizan ambos audios para determinar su veracidad y tomar las medidas pertinentes.
INVESTIGAN ANOMALÍAS
Jonathan Rojas, vecino de Crucitas, aseguró que los oficiales se prestan para cometer irregularidades.
"Greivin (administrador de la finca) es un minero de profesión, lleva dos años en la zona, un guarda salió armado para no dejar entrar a civiles, mientras ellos tienen su gente trabajando.
A los nicas los han amarrado a los árboles y los golpean para que no se arrimen y les quitan el oro. Tienen campamentos establecidos en la montaña donde la policía no llega", afirmó.
Este lugareño agregó que con disparos al aire intentan asustarlos.
"Nada nos intimida. Los policías arrebatan el oro y no formulan ningún reporte, no tienen control de nada, se están prestando para cometer irregularidades. Quitan la comida y las palas a la gente, destruyen carros que están a un lado de la calle, algunos trabajan en la finca de civiles porque se dieron cuenta que hay oro, todos sacan fama de la mina", añadió.
Al parecer el administrador de dicha finca anda armado y se pone pasamontañas para agredir a cierta gente que ha levantado la economía de un pueblo que está abandonado por el Gobierno central y el local, informaron los vecinos.
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CRÉDITOS: Fotos: Isaac Villalta
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Martes 28 Noviembre, 2017
HORA: 12:00 AM
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