El costarricense Edgardo Picado se despide del Mundial Paralímpico de Pulsos con dos metales. Ayer subió al podio nuevamente para colgarse la medalla de plata, luego de figurar en la categoría 90 kg con el brazo derecho.
Picado derrotó en eliminación doble a los representantes de Estados Unidos y Hungría, superó las semifinales ante Rusia, y en la final tropezó contra Eslovaquia.
El deportista tuvo una destacada actuación en la cita que se celebró en Polonia, tras sumar bronce y plata. El lunes, con la zurda, obtuvo el tercer lugar y ayer el segundo, dos posiciones privilegiadas a nivel mundial.
“Ha sido un gran evento, puedo decir que voy totalmente satisfecho para Costa Rica, puse muy en alto el nombre de los pulsos de Costa Rica en este Campeonato del Mundo”, aseveró el atleta.
ACABA CON RACHA
Para el costarricense, el Mundial 2017 también significó saldar una vieja revancha. En “semis”, se enfrentó al ruso Ruslan Mamedov, con quien perdió en 2014. Esta vez la historia fue otra, porque Edgardo tuvo uno de sus mejores pulsos y derrotó al europeo, quien tenía una racha invicta de cuatro años.
“Tener una medalla en un mundial significa la más grande hazaña y lo más sorprendente fue ganarle al campeón Mamedov, quien tenía cuatro años de estar invicto y pude ganarle. Demostré que valió la pena todo el entrenamiento que he tenido en las mañanas, ese sacrificio con la familia, las nuevas técnicas aprendidas, todo va sumando”, subrayó el tico, quien desde ya se pone como reto conquistar el oro el año que viene.
“La bandera de Costa Rica estuvo muy en alto con este segundo lugar y espero seguirle dando glorias al país”, recalcó.
Por último, el deportista tico enfatizó que ahora solo resta “presentar mis logros en el Icoder y que ellos vean que lo que han invertido nos ha ayudado para que este deporte crezca, y que los recursos se están utilizando de una manera correcta”.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Miércoles 22 Noviembre, 2017
HORA: 12:00 AM