Ricardo Talavera tiene 15 años y siempre ha sido un apasionado del fútbol. Empezó en la disciplina de futsal con el poderoso Borussia, pero cuatro años atrás se cambió al fútbol 11 con Fútbol Consultants.
Su meta es llegar a primera división y en ese proceso ha jugado muchos partidos en diferentes canchas, pero nunca se imaginó mejenguear en un barco.
Como apasionado del deporte rey patear bola en el barrio con los amigos es cosa de todos los días, pero hacerlo en altamar es algo nuevo para él.
Talavera es el capitán del equipo La Cimarrona, que salió campeón de la Batalla en Altamar, torneo clasificatorio que se disputó el domingo en el Barrio La California.
Desde ese día vivió una experiencia nueva, jugar tres contra tres a un ritmo intenso y con reglas muy diferentes a las que rigen el fútbol.
“Cuando empiezan los partidos no hay descanso y los partidos son de todo contacto, a uno lo pegaban contra la barrera todo el partido. El juego se basa mucho en el futsal, puro toque”, explicó a DIARIO EXTRA.
Ricardo se encargó de escoger a su equipo y según reveló desde ahí empezó ganando. Su paso por el futsal lo hizo pensar en seleccionar chicos con buen toque del balón y juego en corto, más que centrarse en jugadores físicos y altos.
A la hora de salir a la reducida cancha emplearon una estrategia para resultar vencedores. “Colocamos dos jugadores atrás y uno adelante, a veces cambiábamos, de acuerdo a como se dieran el partido”, destacó.
Otro elemento que a criterio de Talavera les ayudó a ganar el evento fue contar con un equipo con muy buena condición física, ya el juego es de alta intensidad, debido a que la redonda no sale nunca.
Espera repetir la misma estrategia en la Batalla en Altamar contra los clubes panameños.
“Será una gran experiencia jugar en un barco. Esperamos jugadores fuertes, fiel al estilo de los panameños, y será muy atractivo jugar en un barco”, finalizó.
