CONSULTA:
Mi pareja y yo peleamos mucho, él es concho conmigo y me trata mal, además de que me fue infiel, pero me cuesta dejarlo porque lo amo mucho, tal vez sé que lo mejor es dejarlo, pero hay algo que me ata a él, no sé qué será si es temor a quedarme sola o que nadie me ame.
RESPUESTA:
"No importa lo mala que ha sido nuestra experiencia e historia como pareja, yo todavía lo amo”.
“Yo sé que me golpea y me insulta, pero a pesar de eso lo amo”.
“Me humilla, me dice imbécil y que no sirvo para nada, pero no puedo de dejar de amarle”.
“Ha sido infiel varias veces, pero le amo”.
“Mi pareja es cruel conmigo, diay uno no manda en el corazón, y así lo amo”.
“Prefiero aguantar a que me deje, no lo soportaría”.
Si por tu mente pasa esta clase de pensamientos, seas hombre o mujer, debes tener cuidado pues puede ser una señal de dependencia emocional, que tiene varias características como: ver la realidad en forma distorsionada, o manejar conceptos de amor inadecuados que les esclaviza y los hacen continuar “en nombre del amor” en una relación toxica, además de aguantar cosas que no hay que aguantar, como maltratos, falta de valorización, que los usen, así como que se den infidelidades y abusos.
Características para saber si vivimos en dependencia:
Minimizar lo negativo que está viviendo. “Eso no es nada”.
Creer que aguantar es amor. “El verdadero amor debe doler”.
Victimizarse y no hacer nada. “Pobre de mí, ¿qué puedo hacer? Nada.
Inseguridad y baja autoestima. “Es lo que merezco”.
No se ama a sí misma, por eso busca que otro le ame. “Si él o ella no me ama nadie más lo haría”.
Miedo a la soledad. “No puedo vivir sin él o ella”.
Amar no debe doler o ser un infierno. Dar y recibir amor en forma adecuada está relacionado directamente con una personalidad sana, si es insana seremos dependientes emocionales, también es importante resaltar que está tan mal emocionalmente el que abusa como el que soporta el abuso. El que abusa sabe muy bien que no importa lo que haga a la otra persona, esta le aguantará todo, tal vez llore, reclame y grite, pero siempre estará ahí, entonces seguirá haciéndolo una y otra vez.
Por respeto, aprende a amarte, construye seguridad y elimina temores, pon límites claros de trato en la relación para detener el maltrato. No te quedes así, vales mucho, la persona más importante de la relación no es el otro, eres tú. Creo que las personas que se aman así mismas se autoprotegen y toman decisiones que les hacen crecer.
