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Deportes

Buzón de Rodrigo

Herencia extranjera en el deporte tico

Claudia Poll superó a las alemanas Franziska Van Almsick y Dagmar Hase para alcanzar el histórico oro olímpico en Atlanta 1996.

PREGUNTA: Daniel Céspedes Hidalgo (Turrialba, Cartago; vive en San José). ¿Me podría informar sobre casos de atletas extranjeros que dejaron huella en el deporte costarricense, con motivo del Día del Encuentro de las Culturas, que se celebró esta semana?

RESPUESTA: El primer suceso relevante de herencia cultural de atletas extranjeros en el país fue el de Ricardo Saprissa Aymá, nacido en El Salvador, de padres españoles y naturalizado costarricense.

Desde 1932 fue futbolista y entrenador del Orión; dirigió tres veces a la Selección. Como dirigente presidió al Orión, Saprissa, la Asofútbol y el Consejo de Deportes; miembro fundador de la Galería del Deporte.

En los años 1950 y 1970 el tenista greco-costarricense Niko Kaló brilló durante 22 años en 72 países. Aunque nació en San José, sus raíces son diversas, con su padre Anatole, un griego nacido en San Petersburgo, Rusia, y su madre Edith, una salvadoreña.

Entre sus hazañas figuran dos títulos del Orange Bowl en Miami y los trofeos juveniles de Roland Garros y Wimbledon. Jugó 19 años para Grecia e impuso el récord mundial en Copa Davis de más tiempo como raqueta número uno de un país. Dos veces campeón europeo, 20 años monarca griego y el mejor tico ranqueado mundial (fue 30).

Por su lado, las hermanas Claudia y Sylvia Poll fueron estrellas de la natación bajo la guía del técnico Francisco Rivas. De padres alemanes y nacidas en Nicaragua, la primera fue campeona mundial y medallista de oro olímpica en Atlanta 1996, y la segunda, monarca panamericana y medallista de plata en las Olimpiadas de Seúl 1988.

De sangre rusa, el ciclista Andrey Amador Bikkazakova hizo grande al país como protagonista del Giro de Italia y los hermanos Andrey y Natasha Aguilar Komisarova surgieron en la natación, el primero en las Olimpiadas de Moscú 1980 y Los Ángeles 1984, y la segunda en los Panamericanos de Indianápolis 1987 y la Olimpiada de Seúl 1988.

De padre británico y madre estadounidense, los hermanos Noe Mar y Leinani McGonagle nacieron en Costa Rica y ya han sido campeones y subcampeones en mundiales de surf, respectivamente.

Los gemelos Hernán y Óscar Bolaños germinaron en Nicaragua y brillaron en la Sele en citas centroamericanas y del Caribe, entre 1930 y 1946; al igual que el defensor Óscar Duarte, anotador de un gol histórico a Uruguay, en el Mundial de Brasil 2014.

El apellido brasileño Borges no faltó a ninguno de los cinco mundiales de la Tricolor. El tico-brasileño Alexandre Borges Guimaraes jugó en Italia 1990 y dirigió en Japón-Corea del Sur 2002 y Alemania 2006, mientras que su hijo Celso descolló en Brasil 2014 y asistirá a Rusia 2018.

Otros extranjeros radicaron aquí y se destacaron en el fútbol tico, como los uruguayos Julio César “Pocho” Cortés, Orlando de León, Gustavo de Simone, Luis Borghini, Eduardo Méndez, Daniel Casas y Fernando Sosa; los españoles Antonio Moyano, Juan Luis Hernández y Eduardo Viso; los brasileños Nilton Nóbrega, Adonis Hilario y Odir Jacques; el chileno Hugo Tassara, el checo Iván Mraz, el eslovaco Josef Miso, el dominicano Víctor “Mambo” Núñez y el panameño Roberto Tyrrell.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

CRÉDITOS: Rodrigo Calvo, foto archivo Rodrigo Calvo.

EMAIL: [email protected]

Sábado 14 Octubre, 2017

HORA: 09:53 AM

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