La ley más importante para embarazadas solteras
Lic. Gerardo Morales
Hará unos cinco años o más, se aprobó la llamada Ley de Paternidad Responsable.
Esta ley es fundamental para estabilizar y adelantar una maternidad, que es natural porque todos tenemos madre y ella nos conoce antes de nacer, pero también una paternidad responsable.
En algunos casos, el varón aporta para la creación, pero luego se convierte en un nebuloso recuerdo que evoluciona hacia el olvido de la responsabilidad asumida en unos pocos segundos, que es lo que dura el acto de fecundación.
Esta ley es totalmente favorable a la madre y al concebido, y al aplicarla oportunamente, se ahorran procedimientos posteriores engorrosos y lentos que dilatan algo tan digno y normal, como es que todo infante de cualquier género registre madre y padre.
FUNCIONAMIENTO: Al darse los síntomas del parto sigue el internamiento. Ya para esa culminación del embarazo, la madre debe tener como prioridad IDENTIFICAR AL PADRE del ser por venir. Una vez producido el alumbramiento, un funcionario del Registro Civil, estará en contacto junto a su cama, para llenar la información del nacimiento, el género, nombre, fecha, hora, lugar del parto, nombre de la madre, y, por supuesto, EL NOMBRE DEL PADRE. Es una actividad vocal, oral, solo decir el nombre y sus dos apellidos.
Con esto se asegura un camino directo a que se le asigne la paternidad, pues se le comunicará en su trabajo o domicilio, que su nombre aparece declarado como padre. Lo normal, es que aceptemos algo tan trascendente, y que traerá obligaciones y alegrías, proporcionales a la moralidad del individuo.
Si no impugna ante el Registro Civil, su paternidad queda determinada para sécula.
Si se opone, deberá demostrar con pruebas genéticas, que no es el padre.
Esa asignación automática de paternidad, según cada caso, le librará a la madre de iniciar proceso de investigación de paternidad, para lograr lo que tuvo a la mano en la sala de partos, con costos y duración de hasta cinco o más años, mientras el niño seguiría inscrito como solo hijo de su madre, lo que es falso, porque toda criatura desciende de dos personas. Como reitero, el funcionario del Registro Civil no le pedirá prueba alguna de ese nombre, de ese hombre que declara la madre recién inaugurada que es el padre del recién nacido.
