Guápiles. - No es que se bañen en agua bendita ni mucho menos. Lo de ellos es fútbol, del más puro, sencillo, donde gastan el balón pero igual profundizan, donde los peones asumen papeles protagónicos y los capataces también cortan leña.
El Santos frena en seco al Saprissa y busca escalar en el Apertura sin descuidar que va a la final de la Liga Concacaf.
Cotejo que valió el boleto, para vivirlo al borde del sillín, sufrir y alegrarse aunque no estuviera tu equipo favorito ahí… emociones a granel.
QUÉ CALOR
Las acciones comenzaron tan calientes como la misma cancha sintética y dura del Ebal Rodríguez.
Una mano dentro de la zona de los 16 metros con 50 centímetros del cuadro local y el central Juan Gabriel Calderón marca la pena máxima. Gritos como si el local hubiera anotado, eran muchos los morados.
Frente al balón se puso Marvin Angulo quien hizo el tiro a marco pero se encontró a un porterazo, Alejandro Gómez, quien se lanzó hacia su lado izquierdo y le dijo no a las intenciones del cuadro de casaca color remolacha.
La propuesta casera consistió en pases cortos y darle rotación a la de gajos por todas las zonas del terreno de juego, con mucha solidez en la zona de volantes.
La receta tibasena fue balones largos buscando a sus hombres de mayor peligro, sobre todo Bengtson.
El equipo de rojo era el que se imponía, pasaban el balón ante un Monstruo inerte que como un aficionado en un partido de tenis se limitaba a ver la bolita de un lado para otro.
Sobre media hora apareció un cobro de tiro de esquina desde la derecha del ataque santista, hubo un desvío y casi sobre la raya de sentencia definió el gemelo Kenny Cunninghman Brown para poner arriba al primer equipo del cantón de Pococí.
Heridos en lo más profundo de su orgullo, los saprissistas fueron a emparejar las acciones, lo que lograron a cuatro minutos de la primera concreción. También en táctica fija, esta vez de tiro libre, la jugada muy similar a la guapileña, así al minuto 34 marcaba la paridad Julio Cascante, en cara a cara con el meta Gómez.
Pitazo y todos a camerinos a refrescar conocimientos y sus cuerpos ante el fuerte sol y sensación térmica alta.
IGUAL DE INTENSOS
De regreso a las acciones, Saprissa aprendió que lo mejor era hacer lo de su rival, tocar en espacio corto y así ir subiendo en bloque hasta el área enemiga.
En 57 minutos el catracho Jerry Bengtson puso arriba a los morados con fogonazo en el área que desvió la defensa y no pudo detener el cancerbero.
En otra acción hubo quejas en las tiendas caribeñas porque no les pitaron un penal pero minutos más tarde llegaría la sanción tras supuesta falta del arquero Briceño sobre Kenny, aunque la primera fuera más diáfana. En piernas de CL9, Cristhiam Lagos, entraba la paridad, pero faltaba otro pepino.
Ya en 77 minutos Kenny Cunningham puso la cereza sobre el pastel con el 3-2 justo para un equipo que hizo un mejor fútbol y supo tratar el balón.
Esta vez la saprihora quedo olvidada en Tibás, no la montaron al bus.
NOTA EXTRA
Muy triste ver que no estuviera lleno el estadio Ebal Rodríguez y que la mayoría de los aficionados fueran saprissistas. El Santos es un equipo que merece el apoyo de los vecinos de la zona y más allá.
PERIODISTA: Alejandro Fonseca
EMAIL: [email protected]
Lunes 25 Septiembre, 2017
HORA: 12:00 AM
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