En medio de la tragedia y penuria que vive el pueblo mexicano tras el terremoto de 7,1 grados que sacudió el centro de ese país, cientos de costarricenses residentes y que también se encuentran de visita en suelo azteca, se han unido para colaborar con víveres para las personas damnificadas en diversos puntos de la capital, esto a pesar del susto que pasaron.
Tal es el caso de María Fernanda Badilla y Roberto Campos, quienes se encuentran en la nación del norte de vacaciones y vivieron en carne propia la situación. Pese al susto lograron sacar fuerzas para auxiliar a varias personas afectadas.
“Fue una noche complicada, pero logramos dormir por lo cansados que estábamos, Tenemos alerta sísmica y cada vez que escuchábamos una sirena nos desesperábamos. Ya estamos más tranquilos, ya se han habilitado varios centros de acopio y la gente ha comprado muchas cosas para ayudar, la tensión sigue y creo que permanecerá así por unos días”, destacó Campos.
“Nunca habíamos sentido un sismo de esa magnitud, estamos tranquilos, pero hay mucho ambiente de luto. Aunque vinimos a pasear, decidimos comprar pan, atún, frijoles y otros productos para ayudar. Nos quedamos en la casa de unos amigos y no pasó nada, los noticieros no han parado de informar sobre desaparecidos, muertos y heridos”, dijo Badilla.
RETOMANDO LA CALMA
Otro de los compatriotas que se encuentra en México es Miguel Avendaño García, quien vivió desde el piso 14 del hotel donde se hospeda el terremoto del martes en esa ciudad. Nos contó que, a pesar del susto pasado junto a su pareja, logró ser evacuado sin problemas. Además destacó el orden y organización de las autoridades para mantener la seguridad de todos.
“Los centros de acopio están llenos de víveres y todo está escoltado por el ejército, casi no hemos querido salir para evitar hacer ‘turismo-tragedia’, pero les puedo decir que hay mucha seguridad. En el Zócalo hay cientos de personas reunidas como voluntarios y cadenas humanas, poco a poco todo está volviendo a la normalidad”, apuntó Avendaño.
Con respecto a posibles víctimas y ticos con problemas, la embajada de Costa Rica en México ha recibido decenas de reportes por diversas vías, todos indicando que los costarricenses se encuentran en buen estado y sin problemas hasta el momento, no obstante, seguirán indagando al respecto.
La sede diplomática aclaró por medio de sus redes sociales que de momento solo están recibiendo casos urgentes y de emergencia.
El número de atención para los ticos en México es: +52 1 (55) 9105 7717.
