Viste camisa blanca sencilla, jeans azules y zapatos suecos negros, así Keylor Jacob Cole Kelly, alias “Gato Cole”, espera para ser sacado bajo estricta seguridad de su celda en máxima seguridad de La Reforma, donde se alista para defenderse de todas las acusaciones que a nivel social y judicial se le han hecho.
En un cuaderno rojo anotó una serie de frases por si en algún momento duda del orden de sus ideas, de igual modo, porta consigo el expediente judicial por tentativa de homicidio, ese mismo por el cual se encuentra cumpliendo una condena en la prisión más grande del país.
“Gato Cole”, de 26 años, apodado así por el color de sus ojos y por su picardía desde pequeño, asegura que existe una persecución en su contra por parte del gobierno en general, y por esa misma presión que otras personas limonenses han pasado fue condenado a 14 años cárcel por una causa en la que nunca participó.
Afirma además no ser ningún narcotraficante, mucho menos un asesino como muchos lo han calificado, sino que más bien, lejos de ser un monstruo como lo quieren hacer ver, es un joven empresario exitoso que ha conseguido levantarse de la pobreza en Limón.
A continuación, un extracto de la conversación entre Cole Kelly y El Periódico de Más Venta en Costa Rica, en relación con temas actuales, judiciales y sociales que giran a su alrededor.
¿Quién es Keylor Cole Kelly?
-Sencillamente, Keylor Cole es un joven trabajador, inteligente cuyos padres enseñaron desde muy pequeño a desarrollar habilidad en los negocios, tranquilo, ese soy yo.
¿Y quién es “Gato Cole”?
-Diay, un joven emprendedor y muy exitoso.
¿Ha habido muchas especulaciones a su alrededor, podría aclararlas?
-Sinceramente todo eso que han hablado los medios ha sido una completa persecución en contra mía, yo no soy lo que dicen, que manifiestan que soy un narcotraficante y un delincuente, yo no soy eso, yo soy un empresario exitoso, tengo buenos ingresos, estoy registrado en Tributación y hago todo responsablemente; entonces lo que puedo decir es que todo se trata de una presión hacia mí.
¿Cuándo empieza esa persecución, quién la hace y por qué?
-Desde hace mucho tiempo que están en eso, años, la verdad me gustaría saber quién ordenó toda esa cacería, tampoco sé por qué, primero me arrestaron en Plaza Lincoln (Moravia) y yo ni siquiera tenía orden de captura, fue un puro show de la policía. Firmé un documento para someterme a las órdenes de la fiscalía por si ellos necesitaban algo y me lo aceptaron, pero semanas después estando yo en Guápiles con amigos volvieron a hacerme lo mismo, tirándome al suelo haciendo un nuevo show.
¿En qué trabaja usted?
-Mi papá me enseñó a trabajar y a poner en uso la inteligencia, cuando tenía 18 años mi papá me heredó cuatro apartamentos, yo lo que hice no fue quedarme solamente con eso sino que comencé a construir más, luego junté un dinero y comencé a prestar plata, me hice prestamista en la calle y todo ha sido legal.
Usted quiere decir que no se dedica al narcotráfico.
-Yo soy un muchacho preparado, estudiado, tengo mi bachillerato y trabajo, soy honrado, no soy ningún delincuente, ni mucho menos narcotraficante, a mí nunca me han agarrado con drogas, ni he tenido una causa abierta por narcotráfico, entonces no sé por qué todo el mundo y los medios dicen que yo soy esa persona que trafica drogas.
¿Cuántos empleados maneja?
-Tengo 30 personas trabajando para mí, todos me ayudan en cosas diferentes, transporte y mandados.
Lo condenan por atentar contra la vida de un joven de 18 años.
-Eso ya venía arreglado desde altos rangos, pero saber de dónde, ni idea. En ese caso por el que me condenaron, las autoridades violaron mi derecho durante el juicio y tengo pruebas, porque la víctima y mi defensa iban a llegar a un acuerdo, una conciliación, simplemente para salir de ese problema y todo estaba arreglado, pero la fiscalía escondió al ofendido.
¿Entonces usted conocía a la víctima?
-Lo había visto un par de veces, pero jamás participé de nada en su contra, incluso el discurso que dijo era absurdo, porque aseguró que el día que pasaron los hechos él estaba en Guápiles con el hermano firmando en el juzgado, cuando ni siquiera estaban abiertos los tribunales, pero aun así le creyeron.
¿Qué me dice de enemigos o personas con que haya tenido pleitos?
-Es que yo no tengo problemas con nadie, los medios mencionaban que yo tenía pleitos con Dinier Estrada (“Ojos Bellos”), pero en ningún momento llegué a tener un problema con él.
¿Conoce a “Ojos Bellos”?
-Jamás lo había conocido, hasta que lo vi en las noticias cuando fue condenado.
¿Alguien lo ha amenazado?
-Sí, claro, hay mucha gente en Limón que me tenía envidia, diay porque yo logré hacer mis negocios bien y me iba bien, y sufrí de una extorsión de un sujeto que se llamaba Klaus, que mataron en Heredia, y ahora resulta que yo fui el que lo maté, pero yo no estoy acusado de eso. La gente comenzó a especular porque sabía que ese tipo me quería sacar mucha plata.
¿Cuánto le pidió?
-Ahora no lo recuerdo.
¿Keylor, qué cree usted pasa en Limón?
-Bueno, es difícil, Limón tiene mucha gente pobre y el gobierno es el responsable porque no hace nada por cambiar las cosas, faltan demasiadas opciones de trabajo, eso es lo que se necesita, más trabajo para que la gente se ocupe. A mí me hace gracia ver que el Ministro de Seguridad manda un escuadrón de 300 policías cada vez que hay un muerto en Limón, pero en San José matan personas todos los días y nadie hace nada.
¿El trato de la gente cambió después de los primeros rumores?
-Yo tengo bastantes amistades y por supuesto que la gente comenzó a cambiar, me veían raro y hablaban de mí, yo al final opté por no salir ni siquiera de mi casa porque solamente ahí estaba seguro.
¿Cómo se siente ahora?
-Encerrado en cuatro paredes nadie puede decir que está bien, 23 horas al día ahí metido, con un patio pequeño para la luz, es increíble que digan que yo represento peligro o que soy un matón cuando no me meto con nadie, sinceramente estas cosas no pueden pasar en Costa Rica, yo tengo 26 años, imagínese cómo puedo sentirme.
¿Qué pasó con las solicitudes de traslado a Limón?
-A mis abogados les dicen que no porque yo soy muy peligroso, la verdad fiscales y jueces son como una banda organizada y ellos me han querido ver como un enemigo para el país, y para quedarle bien al país me condenaron a mí.
¿Qué le afecta más?
-Estar encerrado y me duele mucho que mi familia esté pasando por esto también, porque ellos tienen que estar viniendo desde lejos para verme aquí encerrado.
La gente cree que usted maneja mucho dinero, hasta viajó con la Sele al Mundial.
-(Risas) No puedo decir nada sobre mis finanzas porque tengo un proceso abierto.
¿Algo más que decir?
-Les agradezco a ustedes por darme la oportunidad de hablar, yo espero salir en algún momento y seguir con mis proyectos como empresario.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Fotos: Herbert Arley
EMAIL:
Jueves 27 Julio, 2017
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA