La osteopatía es una rama dentro de la fisioterapia muy común y de suma importancia en el deporte europeo, y que otros países como Costa Rica buscan copiar. ¿Por qué? Es simple, es un tratamiento efectivo que acorta el periodo de recuperación de un atleta.
Por eso la gran mayoría de clubes del Viejo Continente, incluyendo a los equipos de mayor renombre de España, cuentan con su osteópata que vigila de cerca a sus principales estrellas. De igual manera es un tratamiento que buscan deportistas de todas las disciplinas de alto rendimiento, porque evitan pasar tiempos prolongados fuera de acción.
¿Pero qué tiene la osteopatía que se vuelve casi milagroso para combatir las lesiones musculares que tanto aquejan los deportistas? Francisco Cocera, fisioterapeuta osteópata de nacionalidad española, y quien cuenta con la experiencia de tratar jugadores de equipos españoles como el Sevilla, Betis y alguno del Real Madrid, dice que el trato manual con el paciente, donde hay manipulación de vertebras dejando de lado un simple masaje o poner un aparato de corriente, es determinante y efectivo.
Además, recordó que la osteopatía trabaja en cadenas, por ejemplo, un esguince de tobillo es un trauma que genera alteración en diferentes puntos y esta terapia busca trabajar todo en conjunto, no solo la zona afectada.
“Mi experiencia con jugadores de primera división siempre ha sido muy buena, son jugadores que entienden rápidamente que el tipo de tratamiento que estás haciendo se sale un poco de la fisioterapia convencional y el paciente (jugador) recibe el tratamiento muy bien desde el primer momento, le gusta porque ve un resultado inmediato”.
Contó que en una oportunidad atendió a un jugador profesional de su país -prefirió no darlo a conocer-, quien no se recuperaba de un esguince de tobillo a puertas de un partido determinante para su club, sin embargo al recibir el tratamiento de osteopatía en una semana estuvo recuperado para ayudar a su escuadra en ese duelo.
“Somos fisioterapeutas y osteópatas, entonces, la osteopatía lo que ofrece dentro del mundo deportivo es disminución de los tiempos de recuperación, es una de las principales cosas que tenemos, disminuimos el tiempo de recuperación”, recalcó Cocera.
La efectividad del método es lo que ha atraído a los equipos europeos a tener en planta un fisioterapeuta osteópata, principalmente por la alta exigencia a la que están expuestos sus futbolistas, con partidos tan seguidos de altísimo nivel.
Es un dolor de cabeza al que estuvo expuesta la Selección Nacional en la Copa Oro, con las constantes lesiones musculares por el trajín de partidos, viajes y alta temperatura, sumado a la poca actividad que tuvieron algunos de esos jugadores durante la temporada con sus clubes.
De acuerdo con Cocera, el tratamiento osteopático es capaz de eliminar la posibilidad de una recaída como en una pubalgia, que es tan temida por los futbolistas.
El fisio español señaló que el futbolista o deportista siempre va a preferir estar el menor tiempo posible sin competir y con la osteopatía es posible, según ha comprobado en su vasta experiencia en el mundo de la medicina deportiva.
“¿Qué gana el futbolista? No llega a perder por ejemplo el tono físico, tiene una recuperación más rápida, se incorpora antes a jugar ¿Qué gana el club? A una estrella élite no lo tiene parado 3 meses, es decir estará marcando goles prácticamente 10 o 12 días después”.
La osteopatía ha ganado adeptos por la alta exigencia a la que son sometidos ahora los deportistas, presionados por sus clubes o patrocinadores (de acuerdo la disciplina que practique) a dar siempre resultados.
“Es ahí donde necesitamos un método de tratamiento que haga que el jugador pueda estar a punto para todos esos partidos, porque el desgaste físico es terrible”.
Por tanto, resume que “los futbolistas (o deportistas en general) reciben este tratamiento con las manos abiertas”.
TICOS SE PERFECCIONAN
Francisco Cocera está en el país capacitando a una generación de fisioterapeutas osteópatas.
Cocera es profesor de la Escuela de Osteopatía de Madrid, que es la mayor escuela de formación de osteópatas que hay en el mundo.
Constantemente viene a Costa Rica para darle seminarios a estudiantes ticos, quienes se especializan en esta rama.
“Estamos presentes como en 18 o 20 países. Soy profesor de la escuela y voy pasando por todas las sedes y aquí en la sede de Costa Rica llevamos 5 años, donde tenemos una primera promoción de osteópatas ya a punto de salir, y mi labor es aportar la formación que está estructurada dentro de una serie de seminarios”, detalló el especialista.
Julio Granados es el director de la Escuela de Osteopatía de Costa Rica; uno de los alumnos es Ronny Gómez, quien declaró: “Es una rama que nos ayuda a tratar y prevenir lesiones desde un ámbito más integral. La osteopatía lo que hace es guiar y encaminar a nuestro organismo a una autorregulación, no solo de la zona afectada, sino de todo lo que está circundante y hace que se genere ese desequilibrio”.
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