Una demanda de pensión alimentaria que se tramita en el Juzgado de Pensiones de Heredia y fue solicitada el 8 de diciembre de 2015 por una mujer de apellido Mora mantiene en jaque a Gilbert de los Ángeles Bell Fernández, conocido como “Macho Coca”.
Al limonense investigado por narcotráfico local, se le solicita el pago en primera instancia de ¢320 mil como parte de sus responsabilidades para dos de sus hijos que concibió fuera de matrimonio con la demandante, quien hoy día es vecina de Heredia.
Esta circunstancia ha mantenido en carreras al empresario limonense, ya que, como él mismo asegura a la jueza que lleva el caso, no cuenta con el dinero para hacer frente a la pensión, que después de una segunda revisión el juez de los Tribunales de Justicia de Heredia aumentó a ¢900 mil, tras recibir pruebas y adjuntarlas al expediente del caso, entre ellas las entradas económicas y los bienes de Bell Fernández.
SIN PLATA
En el expediente 15-001592-0503-PA-8 del Juzgado de Familia de Heredia se detalla que en una relación extrafamiliar Bell Fernández tuvo dos hijos con Mora, de 30 años, por eso se fija desde finales de 2015 su responsabilidad para con ellos.
Pero en los descargos de rebajo de pensión presentados el 24 de octubre anterior el empresario pesquero le asegura a la jueza que lleva el caso que ha debido pedir prestado y vender algunos de sus bienes para poder pagar los ¢320 mil al mes.
“Ha quedado claro que mi persona no puede cancelar la suma de ¢900 mil mensuales ordenada en forma abusiva e ilegal por la jueza del Juzgado de Familia de Heredia y en ese sentido he tenido que recurrir a préstamos comerciales y a vender algunos bienes, con tal de cumplir a duras penas con la cuota alimentaria de ¢320 mil mensuales, aprobada en primera instancia por este honorable Juzgado de Pensiones Alimentarias de Heredia y a la vez solicitar dos veces seguidas el pago en tractos de las diferencias de ¢580 mil que no puedo pagar”, reza el incidente de rebajo presentado por el Consultorio Jurídico Álvaro Moreno Gomez & Asociados.
EN QUIEBRA
En el descargo que realiza por medio de su representante legal, “Macho Coca” indica que no cuenta con la capacidad de pago para hacer frente a la pensión, esto luego de que se le estableciera un nuevo cálculo en la pensión y quedara en ¢900 mil.
Afirma que su familia depende de sus entradas económicas, que aunque no especifica a cuánto ascienden, se desprende de sus argumentos que no sería mucho el dinero que gana cada mes con base en su trabajo.
“No hubo una valoración objetiva e imparcial adecuada y ajustada a mi realidad económica al ordenar el pago de la cuota alimentaria, amén de que las circunstancias y mis condiciones económicas desde la fecha en que se impuso la carga de la obligación alimentaria han variado aún más y en forma negativa para mi persona, las cuales definitivamente no me permiten continuar entendiendo la carga económica impuesta”, indica Bell Fernández a la jueza de familia.
La audiencia para establecer la solicitud de rebaja de pensión que presentó se llevará a cabo el 2 de marzo.
Para fundamentar la petición de pensión, la madre de los hijos de “Macho Coca” solicitó tramitar una serie de documentos del Registro Público, Caja Costarricense de Seguro Social, Incopesca y bancos públicos y privados, donde se detallan algunos de los supuestos ingresos.
Además menciona cuatro barcos pesqueros de su propiedad, dos en la Capitanía de Limón matrículas L-1040 y L-2866, y dos en la Capitanía de Puntarenas matrículas P-12207 y P12403.
La expareja del empresario tambien presentó registro de varios vehículos, algunos de ellos valorados en varios millones de colones, como parte de la prueba que fundamenta que Gilberth Bell cuenta con activos para hacer frente a la pensión de sus hijos de 12 y 2 años.
PERIODISTA: Gustavo Retana
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Viernes 17 Febrero, 2017
HORA: 12:00 AM
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