Una llamada de la policía de Jamaica alertó a nuestras autoridades, que decomisaron 1.117 kilos de marihuana High Red que traían tres hombres en una lancha rápida a la costa de Limón.
Según la policía, con esta cantidad de droga se pueden hacer 5 millones de cigarrillos, que en el mercado negro tienen un valor equivalente a ¢5 mil millones.
Se trata de dos nicaragüenses de apellidos Castillo, de 26 años, quien no registra ingresos a nuestro país, y Price, de 29, que según las autoridades reporta uno en junio de este año. Ninguno de ellos cuesta con reseña policial.
Mientras que un costarricense de apellido Gómez tiene antecedentes por transporte de estupefacientes en 2012, cuando le incautaron 3 toneladas de marihuana en Isla Uvita, Limón.
La inteligencia jamaiquina le proporcionó los datos al Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que en conjunto con el Servicio Nacional de Guardacostas montó el operativo.
Nuestras autoridades pidieron ayuda a un avión estadounidense P3, que siguió la embarcación “Dos Colochos” matrícula L3565 y de bandera costarricense, la cual estaba equipada con dos motores fuera de borda de 200 caballos de fuerza, 1 GPS y 2 teléfonos satelitales.
Además transportaba 1 estañón vacío, 1 con residuos de combustible y 10 pichingas que apenas les alcanzaron para que llegaran a su destino, que no fue la guarida sino la cárcel.
A 115 millas de Limón los oficiales de Guardacostas sacaron los botes y emprendieron la persecución, los tres narcotraficantes nunca se percataron de que eran seguidos por aire y por mar.
A 70 kilómetros los oficiales contactaron al piloto del avión P3, que los guio para que la detención fuera efectiva.
SE DEJAN EVIDENCIA
Walter Espinoza, director del OIJ, manifestó que los ocupantes de la lancha lanzaron algunas pacas al mar.
“Se les decomisaron teléfonos satelitales, tarjetas de crédito, comida jamaiquina, documentos y 52 pacas de picadura de marihuana. El 80% de la droga fue levantada del mar, el resto se ubicó en la lancha, que fue llevada al muelle de Portete”, explicó.
La embarcación está inscrita a nombre de un costarricense de apellido Walter y vecino de Limón, quien al parecer se dedica a la pesca artesanal. Reporta que la nave tiene 2 motores de 300 caballos de fuerza y fue decomisada con 2 motores de 200 caballos.
Trascendió que un viaje de Jamaica a nuestras costas caribeñas podría durar entre 19 y 23 horas, dependiendo del clima y las corrientes marinas. En este caso específico los tripulantes se ahorraron alrededor de 2 horas.
Según las autoridades, los nicas y el ticos viajaban a una velocidad promedio de 20 nudos (40 km/h), sin embargo aumentaron la velocidad porque el mar estaba calmo.
EL QUE NO LLORA…
Gustavo Mata, ministro de Seguridad, agregó que la importancia de trabajar en coordinación con otras instituciones del Estado lleva a este tipo de incautaciones.
“Se trabajó con OII, Guardacostas, Vigilancia Aérea y otras dependencias que se sumaron a la arriesgada diligencia, donde se logra divisar varias pacas de marihuana, una vez en tierra se decomisa. La inteligencia actual se maneja en segundos, una vez recibida la información, estamos actuando rápido. Los narcos trabajan con logística y los grupos tácticos en el mar salen en conjunto con otras autoridades para frenarlos”, detalló.
Mata nuevamente volvió a solicitarles a los diputados la colaboración para dotar de equipo a los diferentes cuerpos policiales.
“Necesitamos que los diputados nos aprueben el presupuesto para blindar el país y la región. Se ocupan radares, helicópteros, aviones, tecnología de punta en nuestros sistemas, la dinámica de flujo de drogas va a cambiar.
(Los narcos) le sacan tres producciones al año, están utilizando los mares. El 85% de la cocaína que sale de Suramérica pasa por nuestras costas, existe un mayor consumo y comercio en Costa Rica, donde estamos sacando marihuana hidropónica”, recalcó.
Los tres detenidos que viajaban en una lancha tipo picuda fueron detenidos y trasladados a la fiscalía, donde los indagaron y ahora esperan medidas cautelares. No se descarta que les impongan 6 meses de prisión preventiva.
