Publicar fotos de sus hijos en redes sociales quizá sea la práctica más común e inofensiva para algunos padres, sin embargo sin darse cuenta no saben el error que están cometiendo al compartir imágenes e información básica en estos medios.
La Universidad de Nueva York dio a conocer un estudio en el que evaluó 2.300 perfiles de Facebook, de los que de manera fácil logró obtener nombres de niños, su fecha de cumpleaños, lugar donde viven, mostrando la accesibilidad a información de los menores de edad.
Ante esto la investigación universitaria dejó a la luz que no es buena idea subir imágenes de los bebés, además de que al publicarlas consiguen un gran número de “Me gusta” por ser curiosas y tiernas, generando que sean compartidas, haciéndose más populares aún.
Mikaela Rodríguez, una de las encargadas de la investigación, dijo que los datos en manos de personas equivocadas vuelven vulnerables a los usuarios de esta red social, en la que los asaltantes o traficantes de órganos de menores de edad aprovechan que los padres brindan la información de manera tan fácil.
“Desde el momento en que los padres empiezan a brindar información es el principio de actividad riesgosa, además nuestros hijos están en las redes sociales antes de tener la edad suficiente para hablar ni decidir que no les parece”, afirmó Rodríguez.
A su vez, el estudio advierte que las redes sociales hacen más fácil y rápido la forma de compartir fotos con nuestros amigos y que la forma más segura de proteger a nuestros hijos es resguardar las imágenes, permitiendo que solo las personas que uno desee tengan acceso a ellas.
“Como se explica en la investigación, esta clase de publicaciones son de forma potencial una fuente de información pública que expone a los pequeños y la vida de los padres de una manera tan sencilla que resulta altamente peligrosa”, agregó.
Entre los consejos sugeridos están dar un nombre a las fotografías y no hacerlas públicas en la red social, pues los bebés y niños no tienen la capacidad para decidir y sobre todo hay que tratar de mantener los datos de ellos y sus familias lo más reservados posible.
