El menor de 12 años asesinado el viernes cerca de su casa en Banderas de Pocosol, San Carlos, fue sepultado esta mañana en medio de un gran dolor por los hechos ocurridos.
Anoche se corrió el rumor de que familiares de los detenidos venían a suelo tico a tomar venganza.
"Pedimos la colaboración a la Fuerza Pública para que prestara vigilancia en la vela y en el entierro, como medida de prevención", aseguró Mauricio Solís, jefe del OIJ en Los Chiles, Alajuela.
Hoy en la mañana iniciaron los actos religiosos en Banderas de Pocosol.
Luego y acompañando el féretro y a su familia, cientos de personas se desplazaron hasta el cementerio ubicado en Santa Rosa de Pocosol.
Allí se vivieron escenas de dolor por los violentos hechos que provocaron la muerte del niño. El menor fue identificado como Samuel Francisco Orozco Davis.
La tragedia ocurrió cuando iba con su primo Kevin Orozco en moto, a ambos los emboscaron para luego arrastrarlos unos 300 metros hasta una reforestación donde los asfixiarían.
Los atacantes son dos hermanos que los creyeron muertos, ellos robaron y huyeron en la moto. Kevin, de 15 años, logró sobrevivir y dar aviso a la policía.
Los asesinos fueron detenidos en suelo nica por militares de ese país. El fallecido estaba en 5to. grado de la escuela local y según su padre soñaba con ser doctor de profesión.
