¿Son válidos los resultados que arrojan las encuestas? Esa duda se genera en algunos sectores de la población, que cuestionan los datos que se desprende de los estudios de opinión.
Cralos Denton, investigador y presidente de la casa encuestadora, CID Gallup, conversó con DIARIO EXTRA sobre estas dudas y explicó detalles del último estudio de opinión que dio a conocer este medio.
En la investigación, la mayoría de ticos dan mala nota al presidente Luis Guillermo Solís, no tienen preferencia política, y evalúan al expresidente Óscar Arias como el político con mejor imagen.
Asimismo, consideran el desempleo como el mayor dolor de cabeza en sus hogares, pero tildan la corrupción como el principal problema país. También determinó un estado de pesimismo, en que más de la mitad de los jóvenes ticos quieren irse del país en busca de oportunidades.
Se han generado cuestionamientos sobre la veracidad de las encuestas en redes sociales, sugiriendo que por ejemplo se manipulan datos para impulsar a un candidato. ¿Qué garantía hay en los resultados?
-Empezamos en1977 en una casa de adobe en Heredia con seis mil colones, esa es la mejor respuesta pues aún estamos vivos. Ya tenemos oficinas propias, no solo aquí, sino también en Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador, Panamá y República Dominicana, tenemos 75 funcionarios a tiempo completo, y otros 200 eventuales. Uno no llega a ese nivel vendiendo el nombre de la empresa y promoviendo cosas por debajo de la mesa, entonces todo el mundo lo sabe y quien le va a contratar en el futuro. Si yo voy al médico y le digo que examine mi salud, entonces él me responde que tiene que sacarme sangre, y de ahí pueden hacer todos los estudios. El mismo concepto se da con las muestras, todo lo que hacemos nosotros, depende cómo diseñamos la muestra, y que sea realmente representativa. Acá en Costa Rica hacemos 1.200 entrevistas; recuerdo a un vicepresidente de la República que me dijo: “¿cómo con ese poquitico vas a saber qué piensan 4 millones de costarricenses?”, entonces yo le respondí que so mismo se hace con la sangre. Si hacemos una encuesta con una muestra totalmente aleatoria, cualquier costarricense puede salir favorecido como entrevistado, entonces así podemos diseñar una cosa que realmente se puede proyectar al universo. Para sobrevivir, para tener la empresa que tenemos, no podemos estar manipulando o cambiando datos para favorecer a alguno. Cuando escucho esas cosas siempre digo: qué les provoca este tipo de opinión.
¿Cómo se debe interpretar los resultados de una encuesta, que para minimizarlos han sido reducidos al concepto de una fotografía de un momento?
-Si le cuento cuándo preguntamos ¿qué tan interesado estaría usted de emigrar, de salir de Costa Rica? uno de cada 3 dice me quiero ir, ¿usted cuestionaría ese dato? ¿Qué es lo que siempre provoca cuestionamientos? la parte política. De esta encuesta 85% eran temas no políticos, no veo que nadie cuestione esa parte. Lo que pasa es que de repente uno empieza tocar las emociones de la gente, y toda la vida el que no está de acuerdo con el resultado se queja. No estamos en campaña política, pero cuando ya comenzamos a preguntar la intención de voto el que sale favorecido va a decir, mire: yo siempre he creído en la CID Gallup, y los que salen mal dicen son unos vendidos.
En redes sociales cuestionan el respaldo al expresidente Óscar Arias ¿Cómo se explica el fenómeno?
-Óscar Arias es como un ícono que tiene el país. Cuando preguntamos qué opinión tiene sobre Óscar Arias como persona no estamos diciendo qué le pareció cuando estuvo gobernando. Quizás si preguntamos qué hizo Oscar Arias la última vez, no saldría tan favorable. En 2005 este mismo fenómeno lo vimos con Óscar Arias cuando tenía opiniones favorables muy elevadas, pero cuando llegó el momento de la votación la intención de voto fue bajando, y lo tenemos en las encuestas. En el 2006 sacó la presidencia con pelos en el alambre contra Ottón Solís.
¿Se puede traducir una evaluación de la imagen favorable con posibilidad electoral en el 2018?
-El hecho que esté así Óscar Arias, es porque la gente sabe quién es, en el momento en que el anuncie su candidatura presidencial puede que comience a bajar, porque la gente puede decir: solo queremos a Óscar Arias, pero ya repetir 3 veces, habría que ver.
Algunos críticos consideran contradictorio que la encuesta revele como principal problema país la corrupción, pero la principal preocupación es el desempleo, entonces, ¿cuál es realmente el desvelo del costarricense?
-Hay dos cosas, una es que le señalo como principal problema el desempleo, el narcotráfico, la falta de agua potable o que no hay vivienda; pero después en la casa la preocupación es, por ejemplo, que el dinero no alcanza.
¿Por qué podrían percibir que el principal problema es la corrupción y no la falta de empleo?
-Porque se ha oído tanto de corruptos, salieron los Papeles de Panamá. Cuando comenzamos a hablar de corrupción, los entrevistados como que dan por un hecho que todos los políticos y peces grandes son corruptos. Lo que realmente molesta es la corrupción a granel, como por ejemplo: necesito hacer un trámite en el banco y si echo 10 rojos a alguien puedo pasar en la cola. Después leemos que los empresarios no están pagando a la Caja, cobran a los trabajadores, pero el dinero no lo entregan. Ya han llegado a la conclusión de que mejor me voy del país.
Según la encuesta el país está en un estado de pesimismo, pero la gente tiene expectativa de que cambie la situación económica. ¿Es paradójico?
-Primero la pregunta es: ¿cree que el país va por un rumbo correcto o equivocado? ¡el país como un todo! La respuesta de casi el 80% dice que va por el rumbo equivocado. Pero después se consulta ¿cómo está la situación de su familia en comparación con el año pasado? y una mayoría cree que puede estar mejor. Pero una cosa es cómo está el país y otra cosa es cómo está usted y su familia, las preguntas se refieren a dos cosas diferentes.
En el caso de la calificación del presidente Luis Guillermo Solís, perdió todo el músculo político, y se estancó en opiniones desfavorables…
-Soy amigo personal del presidente Solís, lo conozco desde hace muchos años, fuimos profesores juntos, y viajé con él muchas veces a Panamá. En septiembre del 2013 él vino acá, tomamos café, conversamos, y le dije que llevo muchos años en esto y si había pensado quienes integrarían su equipo de Gobierno y qué iba a hacer, porque si se metió en política existe la posibilidad de que pudiera ganar. Y si ganaba la elección qué iba a hacer a hacer. Él me respondió que estaba pensando en eso, que estaba enfocado en ganar en febrero, que si ganaba iba a comenzar a ver quién lo podía acompañar y qué haría. No podemos meter en el 2018 a alguien que no tenga ideas concretas, no digo que tenga ser expresidente, digo que por lo menos tiene que saber cómo se maneja.
Hay un dato preocupante y es que la mayoría de jóvenes quiera emigrar. ¿Por qué quieren irse y cuál será el panorama para el país?
-Los que nacieron entre el 1982 y 2004, aparentemente no son muy afines con partidos políticos, quieren cambios verdaderamente, son muy independientes en su forma de ser, no les gusta tanto trabajar en grupo. Les gustaría tener su propia empresa, no tienen lealtad al país. Se va a perder todo ese talento si no se responde bien. Tenemos que hacer algo para mantener ese grupo, porque los que quieren migrar son los mejor educados, que sencillamente creen que su porvenir está afuera, es convencer a estos que esta es la tierra de oportunidad, que se queden con su talento y aporten. Hay oportunidad en el sector público para hacer carrera. La empresa privada tiene que pagar mejores salarios, y dar mejores condiciones a estos jóvenes talentosos. Tiene que haber más apoyo al que quiere poner su empresa propia
De su experiencia, ¿qué comportamiento visualiza en los jóvenes para las próximas elecciones?
-Con las cantonales, los milenios no votaron. Hay gente que llega y me dice: mire qué dicha van a regresar el PLN, y el PUSC en el 2018, y nada que ver, lo que pasó es que sólo los rocos llegaron a votar porque a los milenios no les importó esa elección cantonal. La juventud no llegó en las elecciones cantonales, pero sí van a votar en el 2018 los milenios, si usted me pregunta a mi qué van a hacer esos milenios, y como son más o menos el 38%, no lo sé, lo que sí sé es que votan más por personas que por partidos políticos, ellos los ven como concepto anticuado que no saben para qué sirven.
¿Cómo puede el Gobierno contener la salida de estos jóvenes?
-Ya este en este Gobierno el barco zarpó, no van a poder tomar una iniciativa especial, de gran envergadura, lo veo muy difícil, y parte de la decepción, es que es un Presidente que recibió 1,2 millones de votos, porque vieron la posibilidad de un cambio, pero ahora que no hubo cambio, yo si fuera asesor le diría, no ofrezca la palabra cambio, use más como oportunidad. Aquí nosotros no tenemos candidato, no tenemos partido.
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CRÉDITOS: Foto: José Venegas
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Miércoles 25 Mayo, 2016
HORA: 12:00 AM
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