Jaime Penedo será recordado como uno de los mayores fiascos del Saprissa en tema de contrataciones. El portero panameño anunció el miércoles que se marcha del equipo, a pesar de que le quedaban dos años de contrato. Se va porque había una cláusula que le permitía jalarse cuando le diera la gana.
Penedo llegó al Monstruo en diciembre pasado y abandona Tibás menos de cinco meses después con pena y sin gloria. Venía con el cartel de figura, pero se marcha por la puerta de atrás. Una parte de la afición morada nunca entendió su fichaje, ya que el equipo venía de ser campeón y tenía a Danny Carvajal consolidado en la portería.
El guardameta canalero arrancó la pretemporada de manera normal pero le costó encontrar su mejor forma y se perdió los primeros tres partidos del Torneo Verano 2016. Debutó en la jornada 4 en la derrota de la “S” en Heredia por 0-2.
Jugó cinco jornadas seguidas y cuando empezaba a ganarse la confianza de la gente llegó un episodio que marcaría su paso por el club más ganador del país. En la víspera del clásico ante Alajuelense por la fecha 9 recibió un permiso para viajar a Panamá a presenciar el nacimiento de su hija.
Su estancia en el país vecino se extendió por casi dos semanas y el arquero estuvo ausente en tres partidos. Regresó al país y retomó la titularidad como si nada. A partir de ahí su relación con la afición terminó de quebrarse, a pesar de que sus números no eran malos.
En la fase regular atajó en 15 cotejos y recibió 10 anotaciones. Su promedio se vino abajo en semifinales, cuando recibió cinco goles en los dos juegos contra Alajuelense. Más allá de eso quedó la sensación de que nunca dio el salto de calidad que se esperaba de él en los juegos importantes. Pudo hacer algo más en los dos goles que recibió en el Morera Soto y también en los dos primeros que se comió en La Cueva.
La tranquilidad y el tono medio bromista con que anunció su salida el miércoles después de la eliminación ante la Liga dispararon las críticas hacia el panameño. Así culmina uno de los peores negocios del Monstruo en los últimos años.
Todo lo contrario para el panameño, que en estos cinco meses se embolsó ¢25 millones (¢5 millones mensuales), ¢1,4 millones por cada uno de los 17 partidos que jugó con la camiseta morada.
PERIODISTA: Pedro Retana Cuendis
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Viernes 06 Mayo, 2016
HORA: 12:00 AM
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