La presidenta del Banco de Costa Rica (BCR), Paola Mora, se mantendrá en su puesto después de que el Consejo de Gobierno dejara en firme los resultados de una investigación en su contra, en la cual se le acusaba de una presunta violación al deber de probidad.
El Gobierno ordenó la apertura del procedimiento administrativo desde el pasado 8 de enero, después de que la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) trasladara el informe sobre el caso a Casa Presidencial.
La indagación se desprende por la vinculación de Mora en la defensa de un un préstamo hipotecario que suscribió su hermano con la entidad.
“Quedó debidamente probado que la señora Paola Mora renunció a la dirección profesional y como abogada del proceso ejecutivo hipotecario de su hermano en el que se le achacaba una intervención en una fecha anterior a su nombramiento como directora de la junta directiva del BCR.
Se demostró por parte de la señora Mora que la firma contenida en el documento que podría implicarla en un conflicto de intereses no es suya. Mediante una estudio grafoscópico profesional se desestima esa relación de su firma con la que está en el documento. Esto hace que el documento como prueba desaparezca y por tanto se descarta el conflicto de intereses”, sostuvo el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro.
Mora renunció a la defensa del caso de su hermano el 30 de mayo del 2014, y fue nombrada en el BCR el 3 de junio.
“Tal como lo informó la superintendencia de entidades financieras, no se observa de parte de doña Mora acción alguna encaminada a obtener un beneficio para impedir la ejecución del remate, la prescripción de la deuda (…)” recalcó Alfaro.
Como ha informado DIARIO EXTRA, la demanda contra el hermano -quien ya falleció- suma 17 años sin resolución.
El Ministro confirmó que aún mantienen en estudio el caso del gerente general, Mario Barrenechea, quien se presume fue designado sin cumplir con los requisitos para el puesto.