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Sucesos

Exempleado resentido secuestra empresario

Pasó 27 horas con capucha, maniatado y a la intemperie en montaña de Turrubares

  • Uno de los secuestradores fue herido tras un intercambio de balas con los agentes del OIJ

  • Los otros dos nicaragüenses fueron esposados al ser detenidos por los judiciales cuando recogían el pago

  • Este es el vehículo que usó el grupo secuestrador y fue decomisado por las autoridades judiciales

  • Con bolsas de papel en las manos y esposado trasladaron al hospital a uno de los sospechosos

El propietario de dos sodas fue rescatado por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Heredia luego de que tres nicaragüenses lo mantuvieran secuestrado durante 27 horas en la montaña La Soledad, en Monterrey de Turrubares.

La víctima fue interceptado por los extranjeros la noche del martes en Fátima de Heredia, cuando iba a guardar el vehículo muy cerca de su vivienda y fue interceptado por un carro de marca Hyundai blanco con los tres a bordo.

Una vez en el interior del auto le colocaron una capucha negra, lo maniataron y bajo amenazas de muerte por medio con tres armas de fuego calibre 22 se lo llevaron al frío, oscuro y alejado lugar de cautiverio, donde lo tuvieron sentado en una piedra.

Fuentes confidenciales aseguraron a DIARIO EXTRA que uno de los nicas vino al país exclusivamente a privar de libertad al empresario, luego de ser despedido hace un año por la víctima, a quien en primera instancia le solicitaban ¢150 millones en efectivo, dinero que no tenía, pero su familia empezó a recolectar lo que podía.

Michael Soto, jefe de la Oficina de Planes y Operaciones (OPO) del OIJ, manifestó que la operación policial fue un éxito.

"Horas después la familia recibe una llamada extorsiva de personas desconocidas solicitando la cifra millonaria por la liberación, por lo que nos contactan y activamos el protocolo para estos casos.

Se da un contacto con los sujetos para intentar la liberación de la víctima, así transcurren las horas y se acuerda hacer la transacción a primeras horas de este jueves y movilizan a la familia del secuestrado a Grecia", explicó.

Soto agrega que luego se movilizaron a Monterrey, donde se da la entrega de un monto mucho menor (¢8 millones) debido a que la persona no tiene los recursos y en medio de la negociación se logra liberar al rehén.

FUEGO CRUZADO

 

Uno de los tres sospechosos, al verse sorprendidos por la policía y saber que iban a ser detenidos, sacó un arma calibre 22 y disparó de frente contra la humanidad de dos agentes, uno de ellos es impactado en el pecho y el otro esquiva los proyectiles.

Afortunadamente el oficial portaba el chaleco antibalas, donde se alojó el plomo y se hace un intercambio de balazos para salvaguardar su vida y la del rehén, quien salió ileso del enfrentamiento.

Mientras que uno de los delincuentes es impactado en el pecho y un brazo, del que manaba mucha sangre y se revolcaba del dolor.

El secuestrador fue trasladado en primera instancia por una ambulancia de la Cruz Roja a la Clínica de Puriscal y por su condición delicada posteriormente al Hospital San Juan de Dios, donde fue intervenido para extraerle el proyectil y al final de la tarde le dieron de alta.

Después los judiciales lograron detener a los dos hermanos de apellidos Balmaceda Rayo, quienes tienen varios años de estar en el país, y Gutiérrez Moncada, quien estaba de forma ilegal, ya que llegó solo a secuestrar.

 

NEXO FAMILIAR

 

Uno de los detenidos (Gutiérrez Moncada) es exempleado de la víctima, lo que le permitió tener acceso a su información personal, conoció los recursos económicos, y los Balmaceda son primos de la esposa del secuestrado.

Los agentes del OIJ lograron recuperar el arma con que fueron impactados, dos casquillos que quedaron en un zacatal y el Hyundai blanco, que está a nombre de una mujer de apellido Mairena y fue utilizado para trasladar a la víctima desde Heredia hasta una zona montañosa de Turrubares.

Según las autoridades, el empresario padece diabetes, por lo que estaban preocupados por su estado de salud y tras la liberación se mostraba cansado, fue necesario darle el tratamiento que usa a diario para que volviera a la normalidad. 

 

PASEO MILLONARIO

 

Trascendió que los secuestradores portaban documentos de su país y una de las negociaciones para el pago se hizo en San Ramón de Alajuela, donde hablaron con la esposa del empresario, quien temía que el caso tuviera un desenlace fatal.

Según las autoridades, uno de los primos vive en Atenas de Alajuela y el otro en Guararí de Heredia, no cuentan con expediente policial, sin embargo se inauguran con dos de los delitos más castigados que se tramitan con el expediente 16-002074-059-PE.

Se trata de tentativa de homicidio calificado, cuyas penas van de 20 a 35 años de cárcel, y secuestro extorsivo agravado, que tiene una condena de 15 hasta 20 años de prisión, en caso de ser encontrados culpables.

 

BALAS ROBAN LA PAZ

 

Norberto Matarrita, jefe policial de Turrubares, comentó que a las 5 a.m. recibieron la alerta por parte de los vecinos y por la frecuencia de que habían escuchado varias detonaciones. Se verificó la versión de que se trataba de un cumplimiento judicial.

Socorro González, vecina con 24 años de vivir en la zona, aseguró que la despertaron los balazos.

“Estaba dormida cuando escuché unos gritos y como la explosión de un transformador, nunca había oído algo igual, salí a ver qué era y había mucha gente cerca de mi casa. Había dos personas tiradas en la calle, tenía miedo porque no sabía lo que era, un policía del OIJ llegó donde estaba y me dijo que le llamara una ambulancia, ya que había un herido”, narró.

Leonardo Espinoza, lugareño que se tiró las corridas, dijo que los tres primeros tiros que se escucharon fueron detonados por los cacos.

“Después oí 15 bombazos donde los oijotos repelían el ataque, escuché quejidos y observé cuando impactaron al policía en el pecho, por dicha llevaba el chaleco, de lo contrario lo hubiera matado. En el barrio esto fue algo nunca antes visto, sin embargo en San José es normal, por lo que todo el barrio estaba viendo lo ocurrido”, enfatizó.

Algunos que no quisieron identificarse por miedo a represalias, aseguraron que los agentes judiciales estaban metidos en una cuneta y después se escucharon 17 balazos.

Al cierre de edición la Fiscalía de Heredia indagaba a los tres sospechosos, quienes podrían pasar 6 meses en prisión preventiva mientras el caso sigue en investigación. 

Según el jefe de la OPO, la industria del secuestro en nuestro país no ha proliferado gracias que el OIJ ha sido muy efectivo en resolver los casos. 

 

PERIODISTA:

CRÉDITOS: Fotos: Cristian Cartín y Alex Brenes, corresponsal

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Viernes 29 Abril, 2016

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