La intendente de Pensiones, Marjorie Jiménez, renunció anoche a su cargo. La noticia trascendió desde horas de la tarde, sin embargo se hizo efectiva pasadas las 8 p.m. en el Conassif.
Lo anterior luego de que hasta el presidente Luis Guillermo Solís fuera cuestionado por el nombramiento.
Jiménez es asesora directa de Olivier Castro, presidente del Banco Central de Costa Rica, quien participó en la comisión que la recomendó para ser la intendente de Pensiones.
Si no hubiera renunciado, el Estado habría tenido que pagarle más de ¢400 millones.
Alfredo Hasbum, viceministro de Trabajo, fue quien lideró la destitución de Jiménez.
Los ¢400 millones hubieran permitido comprar la cosecha de frijoles de la Zona Sur.
La denuncia del caso la hizo el diputado oficialista Ottón Solís, quien además cuestionó que el nombramiento no se apegaba a los principios del partido en el poder.
Aunque algunos miembros del Conassif anoche dudaron de la destitución, Hasbum insistió en que era lo más conveniente.
El viceministro enviará un proyecto a la Asamblea Legislativa para que los nombramientos de intendentes y superintendencias sean mediante concursos públicos.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
EMAIL: [email protected]
Jueves 18 Febrero, 2016
HORA: 12:00 AM