La torre de destilación de la antigua Fábrica Nacional de Licores (Fanal) se construyó entre 1853 y 1856, esto a base de bloques de piedra o pavas de 80 centímetros. Funcionó con el aparato francés marca Egrot desde 1936, sin embargo el paso del tiempo fue implacable y la deterioró.
Por ello el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural (CICPC) invirtió cerca de ¢43 millones en las mejoras de la arquitectura original de uno de los lugares del actual Centro Nacional de la Cultura (Cenac), sede del Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ).
Verónica Solórzano, arquitecta, indicó que la estructura la levantaron mediante un sistema constructivo en calicanto y presentaba filtraciones en las paredes, que cambiaron su apariencia. “Dadas las características de este edificio, la humedad que se concentra en las paredes de piedra es excesiva, por lo tanto, se eliminaron los repellos internos, permitiendo que ‘respiren’ más fácilmente y por ende, se frena un poco este problema”, relató.
Solórzano señaló que la parte de hierro, visible en el lado interno de la torre, libera de carga y se sustituyó completamente el sistema de recolección pluvial.
“Al quitar el repello nos encontramos con el acabado original y se tomó la decisión de exponerlo y aplicar un tratamiento para que al menos por la parte interna, pueda ‘respirar’ un poco más. La capa de repello hacía que se acumulara humedad y se hicieran las manchas que tenía antes de la restauración”, dijo.Se informó que los trabajos incluyen cambios en las ventanas, puertas, pisos y pintura en la parte externa.
PERIODISTA: Laura Morales Sánchez
CRÉDITOS: Foto: Cortesía del MCJ y SINABI
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Miércoles 10 Febrero, 2016
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