La prevención, la prudencia y el sentido común serán las normas básicas que deberán aplicar los turistas que visiten las playas, los pescadores artesanales y aquellos que buscan una aventura en una embarcación pequeña en alta mar, ya que el pronóstico del Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (Cimar) para los próximos ocho días es de fuertes vientos y mar picado.
Los expertos indican que “un nuevo empuje de los vientos que vienen del norte, por un sistema de presión en Norteamérica y que sale del Golfo de México”, empezó a sentirse en las costa del Caribe y el Pacífico, prolongándose los próximos ocho días.
Para la playa en Puntarenas el pronóstico de las marejadas tendrá una altura mínima de 1,2 metros. Sin embargo los fuertes vientos generarán un mar picado dentro y fuera del Golfo, lo que afecta sectores como la Isla de Chira y Cabo Blanco.
Debido a que los vientos tendrán una dirección norte-noreste con una intensidad en las ráfagas desde ayer de 27 km/h y llegará dentro de ocho días a 85 km/h, el llamado de alerta obliga a tomar medidas.
Además el viento muy fuerte en el Pacífico Norte-Norte pondrá en riesgo “extremo” la navegación de las embarcaciones pequeñas y medianas. El peligro también llega al Lago Arenal, ya que los vientos alcanzarán los 70 km/h, lo cual obliga a la prevención y en el mejor de los casos a que las embarcaciones de todo tamaño no realicen recorridos.
Mientras que los bañistas en el Pacífico Central, que incluye Quepos y el Sur con el Golfo Dulce, tendrán un oleaje promedio y con buenas condiciones para la navegación, sin embargo la recomendación es no bajar la guardia.
Sobre el promedio que tendrán las olas en el Caribe, el Cimar informa que será de 1,9 metros y el próximo martes alcanzará la máxima, que será de 4 metros, mientras que la intensidad de los vientos será de 14 km/h y podría evolucionar a ráfagas de 40 km/h desde el norte.
