Para Alexander Romero y su esposa Shirley Saldaña, hoy se escribe una página importantísima en la vida de su pequeña Génesis, quien recibirá 300 gramos del hígado de su papá en el Hospital Policlínico Metropolitano de Caracas, Venezuela.
El viaje se realiza luego de varios recursos planteados por el valiente padre quien no se conformó con un no cuando le indicaron que su hija necesitaba un hígado para continuar viviendo.
Después de que la Sala IV le diera la razón y a pocas horas de salir hacia Venezuela, Romero habló con El Periódico de Más Venta en Costa Rica y reconoció que viaja con la única esperanza de que su hija pueda iniciar una nueva vida lejos de hospitales y medicamentos.
“Viajamos mi esposa y mi cuñada, porque mi esposa se encargará de cuidarla a ella y mi cuñada a mí, porque le voy a donar 300 gramos de mi hígado”, explicó el padre de tres hijos uno de 18, 11 y Génesis que tiene 1 año y cinco meses.
Los padres son vecinos de Golfito y se trasladaron a San José, hace mes y medio, a la Fundación Ronald McDonald donde pueden estar cerca del Hospital Nacional de Niños, mientras los médicos prepararon a Génesis para el trasplante que se realizará en Venezuela. La operación no se pudo realizar en Costa Rica porque el programa está cerrado por falta de especialistas.
A Venezuela viajará también un equipo médico costarricense integrado por una enfermera, un anestesiólogo, un cirujano y el médico que ha atendido el caso de la niña; ellos estarán durante la cirugía y se mantendrán entre una semana y 10 días. La Caja Costarricense de Seguro Social estimó los costos de viaje, estadía y operación en ¢140 millones y se espera que nuestro país reabra el programa de trasplantes de hígado con el fin de que los pacientes ticos no tengan que viajar a otros países para este procedimiento.
Génesis es la primera paciente tica que será operada en el país suramericano por un médico japonés que radica en Canadá y otro cirujano venezolano.
LE DEVOLVIÓ LA VIDA
“Yo era un amargado como decía mi esposa y ella me devolvió la vida con sus sonrisas y sus deseos de vivir me cambió todo”, dice con la voz entrecortada Alexander Romero, un guardaparques del Ministerio de Ambiente y Energía quien hoy amanece en el Hospital Nacional de Niños cuidando el sueño de su mayor tesoro, esperando que lo releve su esposa para ir bañarse y tomar la maleta para Venezuela, donde espera que con la operación de su hija se abra el camino para que en Costa Rica se puedan realizar dichas operaciones.
“En Génesis se refleja mi madre y mi padre, quienes ya no están, porque ella tiene el carácter de mi padre y la mirada de mi madre”, dice con sentimiento este luchador.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Foto: David Barrantes
EMAIL:
Miércoles 16 Septiembre, 2015
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA