Si bien es cierto la junta del Consejo Nacional de Concesiones (CNC), evitó que el gobierno desembolsará $120 millones en un arbitraje que terminó con la firma de un laudo de conciliación por $43 millones sobre la sección 2 de la ruta 27 San José-Caldera que comprende el tramo entre Ciudad Colón y Orotina, lo cierto es que esto no garantiza la seguridad para los costarricenses sobre una vía que ha sido cuestionada por otras entidades como el Laboratorio Nacional de Modelos y Materiales Estructurales (Lanamme). Para el ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Carlos Segnini, sin el plan de intervención de taludes no se podía recibir la puesta en servicio administrativa.
“La puesta en servicio administrativa era una cuestión técnica y tenía que recibirse, en tanto las radiales y los taludes están en otros procesos algunos viejos y otros con multas”, señaló el Ministro. Al parecer, el jerarca de la cartera hace ver que en realidad el recibo de dicho tramo no se da por una cuestión de seguridad, que no ha estado implícito, sino más bien por un hecho administrativo que le saldría más caro al gobierno.
“Hace mes y pico estaba la puesta en servicio administrativa, pero hasta que no presentaran el plan de taludes no se recibió, eso demuestra la rigurosidad en hacer cumplir las normas de seguridad de la junta directiva”.
Para la secretaría del CNC, Silvia Jiménez todavía hay obras que hacen falta como las secciones 1 y 3 donde lo que falta en una de estas es un desalojo, que no ha querido ser ejecutado por las personas que aún habitan en el sitio, pese a que hay un depósito hecho.
Jiménez tampoco se atrevió a garantizar que pese a la negociación del gobierno y el recibir la sección en cuestión por parte de Globalvía, la ruta era segura para su uso y que no pasará ninguna desgracia, aunque los estudios desde el 2006 por parte de Lanamme indican fallas precisamente en esa sección, donde hay acidez elocuente, problemas de taludes y ni que hablar de las radiales.
“La carretera cumple con los términos del contrato, ninguna carretera es la más segura en el mundo, esta es la mejor para llegar al Pacífico, tiene monitoreo y condiciones necesarias”.
Para Jiménez al igual que Segnini, el gran ganador es el Estado al ahorrarse cerca de $80 millones, pero como dice el adagio “para verdades, el tiempo”, el problema es que los estudios indican que el tiempo ha dado la razón y hasta la fecha no se ha hecho nada en la vía que hasta el momento evite o detenga las constantes contradicciones sobre la misma.
PERIODISTA: Alexander Méndez
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Miércoles 05 Agosto, 2015
HORA: 12:00 AM
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