Cádiz, España. (EFE) - El obispado de Cádiz y Ceuta impidió a Alex Salinas, un transexual de 21 años, ser el padrino de bautizo de su sobrino, hecho que la Iglesia justifica en que por su condición no cumple con el requisito de llevar "una vida congruente con la fe".
"Para la Iglesia yo sigo siendo una mujer, aunque tenga mi documento de identidad cambiado", explicó el afectado, que quiere interponer un recurso para que el obispado reconsidere una decisión que a él le ha sentado "como una patada en el estómago" porque "yo soy muy creyente".
Salinas, quien nació mujer y desde febrero del año pasado tiene documento de identidad como hombre y está en lista de espera para una operación de cambio de sexo, no entiende la negativa para encargarse del hijo de su hermana.
El joven, quien se define como católico, aseguró que en un principio el párroco de San Fernando no puso objeciones, sin embargo todo empezó por los papeles.
La Iglesia, que establece los requisitos para ser padrino de un bautismo en el capítulo 4 del Código de Derecho Canónico sobre los sacramentos, ofrece a Alex Salinas la posibilidad de ser "padrino espiritual".
Ambos, el padrino "real" y el "espiritual", tienen la misma misión, la de ayudar a crecer al niño en la fe católica, aunque solo el nombre del primero de ellos aparece recogido en los papeles de la Iglesia sobre el sacramento.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Martes 28 Julio, 2015
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