Medellín. (EFE).- El episcopado colombiano expresó su rechazo a la práctica de la eutanasia que se aplicó la semana pasada por primera vez en el país a un enfermo de cáncer y señaló que hay alternativas diferentes para enfrentar el dolor.
En la inauguración en Medellín de la 90 Asamblea Plenaria de Obispos, el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Luis Augusto Castro, se refirió al procedimiento de muerte asistida que fue aplicado el pasado viernes a Ovidio González, de 79 años, en una clínica de la ciudad de Pereira (centro).
"Nosotros dejamos en claro nuestra posición. No estamos de acuerdo con la eutanasia. Defendemos la dignidad de la vida desde el momento de la concepción hasta el último segundo de la muerte natural, no artificial", aseguró el prelado.
González, que sufría un agresivo cáncer en la boca que le había desfigurado el rostro y le causaba fuertes dolores, se convirtió en el primer enfermo al que se le aplica, por voluntad propia, la eutanasia en Latinoamérica.
El procedimiento fue posible porque desde abril pasado existe en Colombia un protocolo para la muerte asistida elaborado por el Ministerio de Salud por orden de la Corte Constitucional.
"Cuando se abre una puerta, unos cuantos van a querer pasar. Seguramente habrá más procesos de eutanasia", apuntó monseñor Castro.
Para el prelado, la tarea de la Iglesia es "hacerle ver a la medicina, no desde el punto de vista científico, que hay muchas maneras de enfrentar el dolor" y es tarea de los médicos "saber cómo disminuirlo".
Castro dijo que hay un elemento espiritual en todo este asunto que debería explorarse más y es "encontrarle sentido al dolor".
"El dolor es el megáfono de Dios", sentenció citando al escritor británico C.S. Lewis, autor de la saga "Las crónicas de Narnia".
Aunque está convencida de que vendrán más casos de muerte asistida, la Iglesia seguirá trabajando para que las personas encuentren una "manera distinta a la eutanasia y puedan manejar su situación crítica", añadió.
