El equipo de Barva quiere recuperar -para la temporada 2015-2016 de la primera división del baloncesto nacional- el calor humano y tener a favor la presión que genera el gimnasio del Liceo Rodrigo Hernández del cantón florense cuando está a reventar.
Pero la dirigencia del equipo se ha topado con la negativa de la dirección del Liceo y de la junta administradora para jugar otra vez en casa. El argumento para no ceder el gimnasio es que no cumple con las condiciones para albergar partidos de la primera división.
Al escenario en su momento lo apodaron “el canasto”, porque era un verdadero fortín para Barva en los años 90s y del 2000 hasta el 2007, cuando el quinteto ya bajo la figura de Ferretería Brenes Barva se mudó al Palacio de los Deportes y al Liceo de San Joaquín de Flores porque el Ministerio de Salud giró una orden sanitaria por las pésimas condiciones en las que se encontraba.
“La intención que tenemos es que el equipo pueda jugar sus partidos en el gimnasio de Barva, lo cual no quiere decir que estamos dejando de lado el Palacio, porque este escenario es indispensable para cierto tipo de partidos y etapas del campeonato”, argumentó a DIARIO EXTRA el presidente del club Guillermo Montero.
Los años fuera de su guarida provocó que la afición se enfriara al punto que el equipo no arrastra la misma hinchada. “Lo que buscamos es lograr nuevamente ese núcleo de atracción entre la afición y el equipo”, dice Montero.
El jerarca señala que el equipo nació en el pueblo y quieren devolvérselo al pueblo volviendo a sus raíces.
OBLIGADOS A MUDARSE
Montero manifiesta que no salieron de Barva por gusto, sino que la orden sanitaria los obligó a buscar otras sedes.
“En ese momento el mismo colegio estaba en carreras porque había cosas que no estaban funcionando”, afirma.
El gimnasio fue reabierto en 2013 tras una remodelación millonaria, noticia que llegó al equipo de baloncesto y se animaron a buscar un acercamiento con la dirección y la junta administradora por medio del Comité de Deportes, pero Guillermo Montero asegura que se han negado a recibirlos.
“Anterior a eso no habíamos tenido ningún problema con los señores que estaban en su momento a cargo de la junta administradora del gimnasio, de hecho el último año que jugamos acá se le compraron tableros acrílicos con aros de resorte, también asumimos la pintura de la cancha en su totalidad”, comentó.
POSICIÓN FIRME
El director del Liceo diurno, Carlos Rodríguez, sostiene que el gimnasio no reúne las condiciones para albergar partidos de primera porque no tiene luz, no tiene las medidas reglamentarias, no cuenta con la estructura para los aros en este momento (los que Barva montó en su momento están pegados en una pared lateral), y aparte de eso tiene una agenda bastante llena.
“Yo no soy el responsable del deporte en la comunidad, y primero Ferretería Brenes es un ente privado, por consiguiente tiene que buscar las facilidades para sus actividades privadas, no tiene que el colegio ir en detrimento de la educación de los muchachos para solventar un problema de ellos, segundo lo que es el baloncesto aquí le corresponde al Comité de Deportes y a la Municipalidad ya que reciben un presupuesto”, dijo el director al Periódico de Más Venta en Costa Rica.
Roy González, presidente de la junta administradora, señaló que al día de hoy ni a ellos ni a la dirección ha llegado una nota para acercar posturas.
“El gimnasio actualmente tiene esa orden sanitaria, se le hicieron unos arreglos solo para rehabilitarlo para los estudiantes. Y la cancha del gimnasio Rodrigo Hernández no cumple con las medidas reglamentarias y ellos al menos a la junta no han mandado ninguna nota”.
Tanto Rodríguez como González coinciden en que uno de los mayores obstáculos es que el gimnasio no tiene entrada propia. Es decir, las personas tienen que pasar por un tramo del colegio antes de desviarse para llegar al escenario, lo que para ellos atenta contra la seguridad de las instalaciones.
RECHAZAN ARGUMENTOS
No obstante, la dirigencia de Ferretería Brenes rechaza estos argumentos que califica como “pretextos”, pues durante muchos años jugaron ahí, como la final en 2005 contra el Liceo de Costa Rica. “Nosotros estamos dispuestos a realizar las mejoras que se requieran para jugar ahí, como pintar la cancha, colocar los aros y otras mejoras que sean necesarias”, amplió Guillermo Montero.
Señala al director como la persona que no quiere que se juegue baloncesto ahí. Y explica que antes había un acceso por aparte al gimnasio que fue sellado, por lo que están dispuestos a invertir para que se reabra ese portón o bien que el Liceo ponga su seguridad los días de partido “y nosotros los pagamos”. “Le puedo decir que los dos años que estuvimos jugando ahí cuando se entraba por el colegio no hubo ningún incidente”, apuntó.
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CRÉDITOS: Foto: Rándall Sandoval
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Viernes 03 Julio, 2015
HORA: 12:00 AM
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