El lamentable homicidio en perjuicio de Melcin Gerardo Carrillo Argüello, agente de la Unidad Especial de Apoyo (UEA) del Ministerio de Seguridad Pública, ha dejado una serie de dudas en todos los cuerpos policiales del país, incluso en el OIJ, dependencia que deberá investigar las primeras informaciones que tienen sobre el caso, que apuntan a que la víctima fue asfixiado sin querer.
A Carrillo lo dejaron amarrado de pies y manos sobre la carretera Bernardo Soto, la policía en sus primeras revisiones al cuerpo no logró observar ninguna herida provocada con arma de fuego o blanca.
El cuerpo del agente táctico presentaba una serie de golpes en el pecho, cabeza y tórax, los cuales reflejaron que hubo tortura en su contra.
Este miércoles, fuentes vinculadas al caso manifestaron que Carrillo pudo haber fallecido sin la intención por completo de parte de los sujetos que lo retuvieron, pues incluso entre sus pertenencias resalta un sobre con dinero en efectivo.
ÚLTIMO ADIÓS
Familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo despidieron esta tarde al oficial Melcin Carrillo Agüero. La misa se realizó en el templo de Naranjo a las 2 de la tarde y fue presidida por el capellán de la Fuerza Pública.
A la salida de la celebración y entrada del cementerio, un conjunto de mariachi se encargó de tocar piezas como símbolo del último adiós. Llevaron el cuerpo de Carrillo en una escolta de vehículos de Fuerza Pública al cementerio de Naranjo y desde la iglesia hasta dicho lugar el ulular de las sirenas y luces daban la despidida al oficial.
Los compañeros del uniformado ingresaron al cementerio el féretro y luego lo llevaron hasta el lugar de la sepultura.
