Heredia. -El Team florense se lavó la cara con el título por la dolorosa eliminación en la Concachampions. Los heredianos se olvidaron de la goleada en el Azteca gracias a la celebración del título, tan esperado por jugadores, cuerpo técnico, directivos y afición, por tratarse de uno de los enconados rivales.
Treinta años pasó el Herediano sin ganarle una final a los manudos y había sido criticado por caer en los momentos decisivos ante los grandes Alajuelense y Saprissa.
Pero en esta oportunidad el cuadro florense salió victorioso, en una dramática final que tuvo de todo. La tensión en las graderías y en el ambiente era palpable. Cada aficionado se las ingeniaba para pasar el rato por el dramatismo que se vivió en la cancha, un partido no apto para cardiacos.
Al final una tanda de penales mucho más dramática. Herediano anotó tres y la Liga dos, por lo que los rojiamarillos se quedaron con la copa de campeón.
Al fin los florenses se sacaron la espina con la Liga por las finales que le ganó, incluso en la propia casa de don Eladio Rosabal Cordero.
CAMINO DE ESPINAS
Llegar al cetro no fue fácil para el Herediano, que tuvo un fútbol muy irregular, con cambio de técnico, golpe en la Concacaf y desgaste físico importante.
En la etapa clasificatoria el Team anduvo entre brincos y saltos. La apuesta inicial fue la Concachampions, en la que clasificaron a cuartos de final tras superar el grupo que compartía con el León de México. En cuartos chocó ante el Olimpia, al que sacó con un empate y una victoria, para medirse al poderosos América, que a la postre salió campeón.
En el juego de ida los rojiamarillos dieron el campanazo ganando 3 por 0, resultado inesperado para muchos. Pero se desplomó en la vuelta y cayó 6-0.
Tras ese paso amargo fue goleado por el León en el Morera Soto, lo que le costó el puesto a Mauricio Wright.
Llegó el “Mago Odir” para salvar el barco, con una visita complicada al Ricardo Saprissa. En su debut venció al Monstruo y se acomodó en la tabla de posiciones, luego enfrentó tres veces a Santos, con saldo de dos empates y una victoria, para toparse a la Liga en la final, un oponente que llegaba en su mejor momento y que le tenía puesta la media al Herediano.
Pero en esta nueva oportunidad estaba sentado en el banquillo Odir, último técnico rojiamarillo en ganarle una final a la Liga. Y 30 años después aplicó la misma receta y el Team es monarca del fútbol nacional.
La final estuvo teñida por el dramatismo. En la ida el marcador fue de 1 por 1, lo que le daba cierta ventaja al Herediano para la vuelta.
En los 90 minutos el marcador fue de 1-1 y en los tiempos suplementarios cada oncena anotó un gol más, para darle paso a la ruleta rusa.
Entre aciertos y desaciertos y un gigantesco Leonel Moreira el Team se quedó con la copa de campeón, la número 24 en su historia.
