Los primeros acontecimientos tras el macabro homicidio de Alexander Mendoza, de 11 años, en Valle Bonito de Upala, no fueron los más alentadores para su familia. Ayer conocieron que el niño murió tratando de defender a su hermanita, quien grabó en su mente el aterrador momento y después fue violada despiadadamente.
La pequeña Teresita Mendoza, de 9 años, de acuerdo con informaciones suministradas por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), presenció cada momento del cruel crimen de su hermano, a quien el sospechoso hundió en el barro después de agredirlo físicamente de una forma cobarde.
Tal como lo ha venido informando DIARIO EXTRA, los menores se dirigían a la escuela, ubicada a 1 kilómetro de su casa, pero jamás llegaron. Fue su maestra quien avisó para que reportaran la desaparición de inmediato.
Según parece, la inocencia de ambos menores fue burlada por el sospechoso de apellidos Umaña Morales al ofrecerle una tortuga a cada uno si lo acompañaban a sacarlas de un escondite secreto, dentro de la finca donde él cuidaba ganado y hacía reparaciones en la tubería del agua que abastece a la comunidad.
El pasado miércoles, en una serie de hechos que hicieron llorar a más de un costarricense, oficiales de la Fuerza Pública hallaron sin vida al pequeño Alexander, luego de encontrar a Teresita con serias lesiones e hipotermia, sentada en un tronco dentro del bosque.
DOLOROSA OPERACIÓN
La dirección el Hospital Nacional de Niños informó que la niña debió ser operada en horas de la mañana de este jueves, debido a que presentaba serias lesiones internas producto de la violación a la que la sometió el sospechoso, un peón agrícola que vivía a 100 metros de su humilde casita.
DIARIO EXTRA tuvo la oportunidad de conversar con Maribel Espinoza, madre de las víctimas, con un nudo en la garganta y la voz entrecortada expresó su dolor y su preocupación porque de ahora en adelante no vivirá tranquila sabiendo que los dos hijos que le quedan están expuestos a peligros.
“Es poco lo que realmente puedo decir, me gustaría tener de frente a ese sujeto para preguntarle... (su voz se corta y una lágrima sale de su ojo) por qué me quitó a mi hijo y me le hizo daño a mi chiquita. No puede ser posible que una persona sea tan mala”, dijo angustiada la mujer.
Otros familiares asimilaron el suceso durante este jueves, trabajando en levantar el toldo para velar al niño, quien será enterrado hoy en horas de la mañana.
Pedro Espinoza, abuelo de los niños, dijo sentirse agobiado y desconsolado por todo lo que pasó, no encuentra explicación para entender las causas que llevaron a su vecino a tomar la decisión de estropear la vida de dos angelitos.
“Lloré mucho cuando me avisaron lo que había pasado, simplemente uno quisiera abrir la cabeza de ese muchacho y ver por qué causó semejante tragedia”, declaró.
FISCALÍA QUIERE HUNDIRLO
Ayer en horas de la tarde la Fiscalía de Upala arrancó con la audiencia preliminar para solicitar medidas en contra del joven, contra quien pidieron 1 año de cárcel mientras se desarrolla formalmente la acusación del Ministerio Público.
Celso Gamboa, fiscal adjunto, comentó a DIARIO EXTRA que harán todo lo posible por que caiga todo el peso de la ley sobre este joven, tomando en cuenta que lograron recabar suficiente prueba para el caso.
En la habitación del sospechoso hallaron ropa con sudor, la cual fue comparada en el laboratorio forense del OIJ.
“Hemos estado analizando cada uno de los datos y pruebas de este caso porque no queremos que nada se nos quede por fuera, todos sabemos que lastimosamente es uno de los hechos que más impacto han tenido sobre Costa Rica durante este 2015 y por eso mismo y por la integridad de los niños queremos darle un buen manejo, tan exigente como merece”, acotó Gamboa.
PERFIL DEL SOSPECHOSO
Umaña Morales, de 19 años y detenido por oficiales del Grupo de Apoyo Operacional (GAO) de la Fuerza Pública, es un muchacho que dejó de estudiar a los 11 años por la falta de recursos económicos y prefirió irse a trabajar en fincas para cuidar ganado y así ayudarle a su papá.
Carlos Umaña, tío del sospechoso, dijo que este siempre fue muy callado, y aunque no quiso tocar el tema, aseguró que no fue él quien mató al niño y violó a la menor, algo que confirmó su madre Luz Espinoza, quien alegó haber visto a su hijo trabajar toda la mañana y tarde del pasado martes, cuando desaparecieron los pequeños. Los vecinos lo catalogan como una persona seria, confusa y hasta con doble estado anímico.
Gerardo Mora, conocido de Umaña Morales y allegado a las víctimas, contó a El Periódico de Más Venta en Costa Rica los últimos momentos en que tuvo oportunidad de verlo.
“Era muy extraño, a veces hablábamos y de la nada comenzaba a reírse, después se enojaba, se iba y lo dejaba a uno hablando solo. Hasta donde sé estuvo varios meses trabajando en una empresa en Alajuela o San José y llegó aquí hace unas semanas porque lo despidieron”, relató.
Ayer minutos después de las 5 p.m. el cadáver de Alexander Mendoza llegó al pueblo que lo vio nacer, donde su familia escuchó sus risas contagiosas y donde su triste historia afecta el corazón de miles de costarricenses.
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CRÉDITOS: Fotos: David Barrantes y Eddis Gómez, corresponsal
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Viernes 22 Mayo, 2015
HORA: 12:00 AM
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