Tres hombres fueron condenados a 15, 12 y 3 años de cárcel por robar ganado y talar los árboles de un finquero identificado como Santos Medina Pérez, quien apareció asesinado y quemado en San Juan de Pococí.
Los restos de la víctima fueron hallados el 16 de noviembre del 2010, en una finca de su propiedad, por dos oficiales de la Fuerza Pública. Incluso, cuando estos llegaron al sitio observaron que aún salía humo de un hueco donde quemaron a Medina.
Por la muerte del finquero absolvieron a los ahora condenados en el 2012. Sin embargo el Ministerio Público apeló la sentencia y el Tribunal de Apelaciones ordenó un nuevo juicio, pero solo por el robo de ganado y la tala de madera.
Fue así como en febrero pasado el Tribunal Penal de Pococí los condenó por robo agravado y aprovechamiento forestal.
TESTIGO PROTEGIDO
Gustavo Santamaría, fiscal coordinador de Pococí, comentó a DIARIO EXTRA que los condenados son de apellidos Azofeifa, a quien le impusieron 15 años por robo agravado y aprovechamiento forestal; Durán, quien deberá descontar 12 años por robo agravado; y otro sujeto también apellidado Azofeifa, a quien le impusieron 3 años por extracción ilegal de madera.
Santamaría explicó que en un primer debate no se pudo probar el homicidio, incluso aunque contaban con un testigo protegido, al cual el Tribunal en aquel momento no le dio credibilidad a su testimonio.
Ante esta situación Santamaría apeló y el Tribunal de Apelaciones ordenó un nuevo juicio. “El homicidio dijeron que no se podía probar”, declaró.
En el nuevo debate sí se pudo probar la tesis de la fiscalía y los jueces acreditaron todo lo expuesto por los testigos.
AUTOR INTELECTUAL
El fiscal coordinador explicó que el autor intelectual del robo del ganado y la tala de la madera fue un hombre de apellido Durán, quien coordinó con transportistas de la zona el traslado de las reses.
Incluso puso un fierro para volver a marcarlas y las llevaron a una subasta ganadera. Luego de la venta, los cheques con los que se pagó dicho ganado fueron endosados a su nombre.
Para Santamaría dicha situación fue clave para probar la participación de Durán en los hechos, ya que incluso nunca fue a la finca de Santos.
