Luego de que el presidente Luis Guillermo Solís firmara una reforma de la Ley Nº 8.634, del Sistema de Banca para el Desarrollo, el gobierno puso en marcha el reglamento que facilita el acceso a créditos con bajos intereses y apoyo técnico para los productores y emprendedores ticos.
“Después de tanto años contamos con la ley y su reglamento, que traslada al productor nacional los fondos de este ahorro que se ponen al servicio por medio de una amplia red de agencias financieras reflejando la voluntad del país en poner a funcionar de manera democrática, el crédito para la producción, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas”, comentó el presidente Solís antes de la oficialización del documento.
Welmer Ramos, ministro de Economía, Industria y Comercio (MEIC) explicó que el sistema de financiamiento cuenta con 42 operadores, los cuales están acreditados ante el Consejo Rector, entre ellos cooperativas y microfinancieras que ayudarán a colocar créditos a productores agropecuarios y emprendedores de todo el país.
Además, las reformas aprobadas permitirán operativizar el denominado peaje bancario, para que las Pymes, pequeños productores agrícolas y emprendedores cuenten con más opciones para la obtención de créditos, con un capital de ¢280.000 millones provenientes de la banca privada y un 5% de las utilidades de la banca pública.
Ramos detalló que la articulación de los fondos permite elaborar un ecosistema de fomento productivo para crear empresariado e inclusión financiera y económica, para la generación de empleos de calidad a micro, pequeñas y medianas empresas, el aumento de la inversión en el país, la promoción de la competitividad y la producción de las Pymes.
MÁS OPORTUNIDAD
Para los interesados en acceder a estos recursos, el MEIC informó que serán administrados por el BAC San José a los beneficiarios de Ley, la misma establece que se facilitarán a tasa básica pasiva si el préstamo es en colones; en el caso de créditos en dólares, se debe realizar con la tasa de interés neta promedio de captaciones a seis meses plazo de la banca privada calculada por el Banco Central de Costa Rica; generando otras opciones más accesibles para el financiamientos de créditos productivos.
