El presupuesto todavía preocupa al presidente Luis Guillermo Solís, pues aunque ya fue aprobado deja claro que se comunicó con los diputados para trasmitirles la certeza de que el suyo no es un gobierno dispendioso o gastón sino uno que toma en serio las obligaciones que llevaron a su elección.
“Queríamos dar fe que no vamos a convertirnos en una administración que, como muchos en el pasado, utilizaron irresponsablemente los recursos públicos. Por supuesto hay, o hubo, discusiones sobre las prioridades concertadas en el marco del diálogo que iniciamos y los proyectos que estarán en extraordinarias”, dijo a los medios de prensa.
Agregó que el Poder Ejecutivo es respetuoso del procedimiento que se ha seguido en el Poder Legislativo sobre las consultas que los diputados han hecho.
Reiteró que el gobierno tiene una responsabilidad porque no se puede paralizar si se está llegando a fin de año, hay una gran cantidad de tareas que va a acometer.
“Lo haremos con la austeridad posible, velando por que cada colón que se ejecuta desde cualquiera de las instituciones públicas sea usado para el logro de los fines para los cual fueron concebidos en un principio y valorando la importancia que tiene el seguimiento y la evaluación permanente”, comentó la Ministra de Planificación ante la orden emitida para la rigurosidad de la administración del dinero.
“Queremos hacer bien el trabajo. Con esta directriz reafirmo el compromiso y la vigilancia que tendrá este gobierno con el uso eficiente de los recursos públicos y con el cumplimiento de los objetivos establecidos en el Plan Nacional de Desarrollo.
Vamos a recortar los gastos superfluos donde existan y se documenten adecuadamente. Quiero que los recursos que nos den se inviertan como tienen que invertirse”, sentenció el Presidente.
