La jornada del espacio televisivo Dancing Whit The Stars (DWTS) sorprendió (o desilusionó) cuando, en una dudosa y sospechosa decisión, se comunicó que, por petición de los jueces, no habría eliminatoria. Algunas estrellas se sorprendieron y otras, como Maureen Salguero, hicieron cara de extrañeza y otras de disgusto o de duda. Este episodio fue muy evidente y muchos así lo comentaron, especialmente por la reacción de Maureen y su pareja de baile Roberto González. ¿Qué fue lo que realmente pasó? ¿Se cayó el sistema? ¿Querían salvar a alguien cuya salida era inminente?
Eso sí, la producción estuvo impecable en todos los aspectos tal y como nos tiene acostumbrados Mario Nájera, de Teletica Formatos que encabeza personalmente Paula Picado, quien pasa pendiente de todos los detalles.
La sorpresa más agradable fue el baile de gala que presentó Sabrina Fuchs, artista indiscutible de ballroom y ganadora de premios internacionales en esa especialidad. Gracias Sabrina por esa fantasía y elegancia que derrochó sobre la pista del Marco Picado.
Les tocó abrir el baile a Alex Costa y a Alhanna Morales. Me gustó mucho la coreografía, aunque los jueces fueron muy duros y críticos con la participación, incluido Cesar Meléndez, quien parecía que estaba enojado.
Tras haber tenido una mala racha, Alejandra González obtuvo la calificación perfecta de 30 puntos al bailar pasodoble con Ronny Hidalgo, quien anda muy enamorado de una de las coreógrafas. Se lo tenían muy calladito. Este muchacho es un buen bailarín, seguramente el mejor, pero en la jornada anterior no estuvo tan bien.
Esperemos que mantenga el ritmo y que tenga tiempo para el noviazgo y para los ensayos. Alejandra González revivió como el Ave Fénix, y una vez más volvió a brillar. Como Ale Ale está en el último lugar, estaba preparada para enfrentarse en el reto y, como se mantiene en esa posición, dice que está lista para lo que venga este domingo.
El primer lugar que ocupan Alex Costa y Alhanna Morales se lo han ganado con talento, destreza y profesionalismo. Este Juanca Galindo convence en cada jornada, por eso y por el innegable apoyo del público, merece estar en la final.
Alex Costa, a quien en algunas oportunidades el jurado lo ha castigado por su condición de humorista, se la jugó muy bien al elegir dos canciones que le permitieron bailar como todo un profesional y hacer derroche de su humor, especialmente cuando bailó Single Ladies, de Beyonce.
Pedro Capmany y Yessenia Reyes se lucieron en ambos bailes. Además, Pedro se nota más seguro, más dueño del ambiente, más tranquilo y sereno. Pedro se ha convertido en la verdadera revelación de un programa donde jamás se hubieran imaginado el éxito contundente de un roquero como él. Tiene carisma, talento, simpatía y una química natural con las mujeres. Pedro siempre sobresale por sus actuaciones y por enfrentarse en la pista a ritmos que no están en su repertorio.
Pedro le salió al paso a Flor Urbina, quien aseguró que la pieza que habían bailado no les había quedado igual a la de la película en cuestión, argumento que ya había rebatido David Martínez. Evidente molesta, la jueza le dio al consentido Pedro menos puntos que Martínez, quien siempre es el más duro.
A César Meléndez o le jalaron el aire o le escondieron las paletas con el número 10 porque en esta oportunidad solo recetó un diez, varios nueves y algunos ochos. Seguro quiere que lo recuerden como al Novillo Martín Aldaburu, quien siempre repartía nueves. También César se empeña en hablar cada día en forma más complicada.
Maureen Salguero salió con un vestido rojo muy sexy. Al final enseñó buena pierna y algo más.
No me gustó el vestido con que apareció Lorena Velázquez. Parecía un traje mal cortado. Incluso, por momentos se notó que le incomodaba con el movimiento. En el segundo baile apareció cantando y, aunque no lo hizo mal, eso no le favoreció en la calificación que le dieron los jueces. Debo decir algo que no me gustó de Lorena: al subir las escaleras, dejó a su compañero perdido. Eso no se vio bien. No se hace porque compañero se es hasta el final.
Shirley Álvarez aparece muy linda en este programa. Ese tipo de vestidos le favorecen. Pueden ser de encajes o brillantes; siempre se ve espectacular.
Un saludo para Amanda Moncada, quien estaba entre el público apoyando a su hija y cuidando a sus dos nietos Sebastián y Felipe quienes intervinieron como actores en una de las piezas que bailó su mamá Lorena Velázquez. Fue un lindo detalle. Muy emotivo.
Me gustó ver al juez David Martínez más relajado, más animado e incluso haciendo bromas con sus compañeros. Ahora sí parece que disfruta su trabajo.
Durante estas diez galas del programa hemos seguido de cerca el trabajo del periodista Josué Sánchez tanto para Teletica.com como para DWTS y lo hace muy bien, ojalá podamos seguir disfrutando de su buen trabajo en otros programas de esta televisora.
Así es la cosa mariposa. La suerte está echada. El próximo domingo, ante la ausencia de eliminación en la última jornada, se marcharán dos estrellas (salvo que los jueces salgan con un domingo 7). Quedan avisados. Creo que el pulso se lo echarán Ale Ale y Maureen y, en el caso de esta última, habrá que ver si no la vuelven a salvar sus amiguis del jurado. De lo que sí no tengo duda es que el 9 de noviembre estarán en la disputa Alex Costa y Pedro Capmany y alguna de las damas. Eso sería.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Rogelio Benavides
EMAIL:
Viernes 31 Octubre, 2014
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA