Cinco meses después César Eduardo Méndez sale por la misma puerta por la que entró con la ilusión de celebrar títulos con Herediano, y convertirlo en un equipo fuerte. “Mi meta es superar los números de Marvin Solano, que fueron muy buenos”, mencionó el uruguayo aquella tarde del 28 de marzo de este año.
Ese día sentado junto a los directivos David Patey, Orlando Moreira y Aquil Alí, más el director deportivo Jafet Soto, dio sus primeras palabras como estratega florense, en lugar de Solano.
Ayer fue cesado de su cargo porque el Team “juega feo”, según las razones que les expusieron los dirigentes en una reunión que duró dos horas.
Los resultados tampoco lo acompañaron, sacando un 52% como nota en los 18 partidos que dirigió. El empate a un gol ante el León de México, en el que el Herediano hizo un buen juego, no cambió la decisión de la directiva rojiamarilla, que tenía decidido desde el lunes cambiar de timón.
Tras la derrota 2-1 contra Pérez Zeledón la directiva se reunió de emergencia y ratificaron la decisión el jueves por la noche. Es decir, cuando Méndez venía en el avión de vuelta de México ya no era más el timonel del cuadro rojiamarillo.
“Respeto la decisión como la respeté el día que me dijeron que me iban a dar trabajo acá, pero hay otras expectativas o no sé qué otra visión hay de lo que es fútbol ofensivo”, dijo Méndez en el Rosabal Cordero, donde llegó por sus pertenencias y para despedirse.
“Me sorprende porque desde que tomé el equipo a finales de marzo, recuerdo aquel partido donde nos tocó perder con la UCR en casa, partido complicado, tuvimos conversaciones con la directiva, pero el momento crítico pasó. Se tomó como una crisis los dos partidos ante Saprissa (Torneo de Copa), venimos con un resultado importante a nivel internacional jugando como equipo, donde la figura fue todo el equipo”, respondió a la dirigencia que ahora no comulga con su manera de juego ni forma de ver el fútbol.
“No me lo esperaba, venimos de ganar en casa internacionalmente 4-0, por más que el equipo perdió en Pérez porque tomamos decisiones, podemos tener 30 jugadores pero el nivel de todos no es el mismo”.
Del rendimiento que tuvo en el banco del Team reconoce que los números no son buenos, pero justifica que como técnico los tiene que analizar con otros ojos. “Quiero aclarar que el equipo siempre jugó a ganar, nunca planteamos un partido para perder”, apuntó.
Dice que se va tranquilo porque cumplió la principal tarea que le encomendó la directiva de sanear el camerino.
“El camerino cambió bastante, lo que se me pidió en su momento fue que hubiera orden y disciplina de parte de un plantel de futbolistas, creo que hoy Herediano lo ha logrado, más allá por la forma en que nosotros exigimos, todavía me faltaba un poquito. Pero no hay duda que hoy el plantel entrena, se presenta en los tiempos correctos, se prepara con disciplina y el orden ha vuelto a la casa. Eso lo logramos, se tuvieron que tomar decisiones fuertes y duras”, lanzó Méndez en su despedida.
