Super mamá o mamá compartiendo responsabilidades

Ejercer la maternidad no es una tarea fácil y hacerlo en estos tiempos, donde muchas mujeres hemos decidido ser madres y profesionales a la vez, es todavía más difícil, sin embargo, es una tarea que se puede alcanzar, especialmente cuando se comparte la responsabilidad de la crianza y educación de los hijos e hijas.

Ser madre jamás debe ser un impedimento para que una mujer se realice profesionalmente, las estadísticas nos indican que la incorporación de las mujeres al mercado laboral ha venido en aumento, que pasó de 38,5% en el 2003 a 45,2% en el 2013, no obstante, todavía muchas mujeres no han podido incorporarse a este espacio.

La incorporación de las mujeres al mercado laboral ha venido en constante crecimiento, sin que se acompañe de un cambio en los roles tradicionales, lo cual sigue siendo un factor que les imposibilita el acceso pleno a diversos espacios sociales.

Cuando se analizan los motivos por los cuales las mujeres no asisten a la educación formal, el 18,87% de las mujeres no lo hace porque tienen que cuidar niños, ancianos u otras personas.

En zona rural esta cifra alcanza casi el 22%. De igual manera, un 4,5% de las mujeres no asiste por embarazo o matrimonio y otro 2,02% porque tiene que ayudar en oficios domésticos.

Estos datos evidencian que el cuido de personas adultas mayores y niños y niñas sigue siendo una responsabilidad exclusiva de las mujeres que, en la mayoría de los casos, les impide su desarrollo profesional.

La encuesta del Uso del Tiempo del 2011 nos confirma la persistencia de profundas diferencias por sexo reflejadas en la Carga Global de Trabajo.

Los datos evidencian que en la distribución de la responsabilidad del trabajo doméstico no remunerado prevalece el modelo tradicional de los roles de género, en donde la responsabilidad social del mismo se asigna socialmente a las mujeres.

Por ejemplo, este estudio señala que las mujeres dedican al trabajo doméstico no remunerado un tiempo efectivo semanal de 37 horas, mientras que los hombres invierten 15 horas y 37 minutos, una diferencia de más del doble en horas.

Si bien es cierto, somos las mujeres las que parimos, el cuido, educación y crianza de los hijos e hijas debe ser una responsabilidad compartida que les permita tanto a hombres como a mujeres desarrollarse por igual en otras áreas como el deporte o el ámbito profesional.

Nuestro país tiene transiciones veloces, donde mujeres y hombres afirman derechos, opciones de vida, defienden y se atreven a tener maternidades y paternidades distintas reafirmando y convocando al afecto y a la protección, pero no por eso renunciando a constituirse y desarrollarse como personas.

Deseamos que esta celebración de las madres sea 365 días al año, y esperamos que en ese largo “haciendo camino al andar” reivindiquemos el derecho de las mujeres a decidir y tener una maternidad gozosa, en libertad y con condiciones para desarrollarla.

*Ministra de la Condición de la Mujer, Presidenta Ejecutiva del INAMU.

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Martes 19 Agosto, 2014

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Por: Alejandra Mora Mora.