Unas 8 hectáreas de bosque natural y una de bosque secundario del Parque Nacional Marino Ballena, fueron invadidas con el propósito de iniciar construcciones en la zona. Los daños están siendo investigados por las autoridades del Programa de Control y Protección del Área de Conservación Osa (Acosa) y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
“Los vecinos denunciaron una intervención no autorizada en la que se dio tala de árboles y afectación a una fuente de agua potable en una área que es patrimonio del Estado, nadie puede hacer esto, la Ley Forestal solo autoriza la intervención para trabajos de investigación o educación forestal”, expresó Carlos Madriz, jefe de Acosa.
La municipalidad de Osa y los representantes del Ministerio de Ambiente, iniciaron investigaciones pertinentes, pues la experiencia en la zona, induce a los peritos a creer que se busca crear un espacio para construir frente a la playa.
Madriz agregó que dada la situación solicitará la intervención del Tribunal Ambiental.