En el Plan Integral de Combustibles y Asfaltos, elaborado por autoridades y funcionarios de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) conocido como Plan B, en el apartado destinado al análisis del gas natural, entre otros, señala que es importante el impulsar la aprobación de una reforma del artículo primero de la Ley de la Refinería a fin de incluir la importación, transformación y distribución del mayoreo de dicho producto como parte del monopolio manejado por la empresa.
Se reconfirmó también en una opinión jurídica de la Procuraduría General de la República (PGR) que el gas natural, al no ser un derivado del petróleo, no se encuentra dentro del monopolio de Recope, por lo que otra instancia puede importarlo para su uso.
Entre otros, en el capítulo de conclusiones y recomendaciones se indica: “Definición legal por medio de la autoridad competente que expresamente autorice a Recope desarrollar las actividades relacionadas con el gas natural y que esta definición aclare si es mediante el concepto de monopolio o no”.
A CASI 5 AÑOS
Según plantea Recope en el Plan B, para incursionar en la importación, distribución y comercialización del gas natural requerirá de casi 5 años, que contemplará desde el momento de la licitación y adjudicación de la ingeniería básica hasta el desarrollo y ejecución de las obras del proyecto y se estima que el monto a invertir será de $104,2 millones, de los cuales $4,2 millones serán destinados en la supervisión en la fase constructiva, en caso de concretarse.
El proyecto se desarrollaría entre 3 etapas. La primera consiste en la construcción de una terminal con capacidad de almacenamiento de 45.280 metros cúbicos dividido en 2 tanques de 22.640 metros cúbicos cada uno y una capacidad de regasificación de 400 mil toneladas por año.
Además, se tendrá que hacer adaptaciones en el muelle a fin de habilitar un gasoducto para transportar el gas natural a la planta térmica de generación eléctrica de Moín y la refinería; finalmente, se deberá contar con el carguero para despachar el gas.
“El estudio que disponemos en este momento es un estudio muy preliminar. La infraestructura recomendada para la terminal no incluye la inversión en el puerto dedicado de atraque para los barcos gaseros. Además, la inversión estimada tiene una incertidumbre de +/-50%. Existe la posibilidad de que la inversión inicial aumente si al realizar los estudios por las razones indicadas anteriormente, se tiene que variar el tamaño de los tanques o desarrollar las instalaciones nuevas para atracar los barcos gaseros”, detalla el documento.
También llama la atención que para ser rentable, la demanda debería rondar las 200 mil toneladas por año, pese a que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) externó en su momento que el gas natural podría ser usado en sustitución de diésel, para la generación eléctrica, este no ha emitido un compromiso de compra.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
EMAIL: [email protected]
Martes 11 Marzo, 2014
HORA: 12:00 AM
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