Los grupos ambientalistas están satisfechos, pues su lucha contra los transgénicos entró en una cuenta regresiva. Solo 14 cantones no se han declarado libres de este tipo de productos, lo cual indica que un 82% del territorio nacional no tiene interés en cultivar semillas con alguna alteración genética.
Alajuelita, Bagaces, Cañas, Carrillo, Cartago, Jiménez, Los Chiles, Curridabat, Miramar, Orotina, Pococí, San Mateo, Sarapiquí y Turrubares son los lugares donde aún no se manifiestan contra los cultivos alterados, pero de acuerdo con varias personas, en los próximos días esta lista podría disminuir.
“Cada una de estas declaraciones ha implicado movilizaciones, conversatorios, talleres o reuniones con personas organizadas en las comunidades.
Esto ha sido posible gracias al trabajo de una gran red de personas, organizaciones y comunidades en todo el territorio nacional, que se activó por la defensa del maíz criollo, pero ha logrado generar un debate más amplio sobre los transgénicos, que resulta inédito en nuestra sociedad”, acotó Mauricio Álvarez, miembro de la Federación Ecologista.
Para las personas que se oponen a los transgénicos, estos son cultivos con una variación genética peligrosa porque podrían afectar la salud de las personas.
